Mientras la principal arteria de la localidad Ramos Mejía, en el partido Bonaerense de La Matanza, se llenaba de vecinos que reclamaban mayor seguridad y pedían “que se vayan todos”, el presidente Alberto Fernández hacia campaña en otra ciudad del conurbano.
El asesinato del kiosquero Roberto Sabo, de 48 años, durante un asalto el domingo, a tres cuadras de una comisaria, fue la mecha que prendió este lunes una jornada tensa en el corazón del principal distrito electoral del país a cinco días de las elecciones legislativas.
La primera protesta de los familiares de la víctima y de los vecinos se produjo el mismo domingo por la noche. El ministro de Seguridad de la provincia, Sergio Berni, fue insultado y abucheado cuando llegó al lugar para hablar con las autoridades policiales sobre los hechos que envuelven el crimen. Munidos de escudos, la guardia de Infantería de la policía tuvo que proteger al funcionario de quienes encabezaban la protesta.
Berni dijo que no se relacionaba el asesinato con una “cuestión policial”, al destacar la rápida detención de la pareja responsable, sino a “un sistema que no funciona”.
El gobernador Axel Kicillof reconoció ayer que “la inseguridad es crítica” en el conurbano y argumentó que esa situación viene desde “hace muchísimos años”. También respaldó a Berni al señalar: “La posición de Berni como ministro de Seguridad es dentro de la ley todo, fuera de la ley nada. Por fuera de ese rol, es un dirigente político y tiene sus posiciones”.
“Nos estamos encargando de hacer una transformación muy fuerte en la formación de la Policía, en la inversión y en la profesionalización”, aseguró Kicillof en declaraciones radiales.
En medio de las críticas por la ola de inseguridad, Berni reiteró sus discrepancias con la política del Gobierno Nacional y no descartó dar un paso al costado después de las elecciones. “Me voy a tomar 24 horas después de las elecciones para recapacitar muchas cuestiones políticas en las que tengo diferencias”, expresó el funcionario en declaraciones radiales.
El jefe de la cartera de Seguridad Bonaerense no negó la posibilidad de dejar su cargo. “No se trata de renunciar o no renunciar, es indistinto, pero lo importante es si el Gobierno puede retomar el rumbo que todos queremos”, explicó.
Semanas atrás Berni mantuvo un tenso intercambio con el ministro de Seguridad de la Nación, Aníbal Fernández, a quien le cuestionó su respuesta ante el conflicto con la comunidad mapuche y sostener que la Nación tendría que haber enviado tropas a la zona ante la posibilidad de que se estén llevando a cabo actos terroristas.
De campaña por el conurbano
Por la tarde, el presidente Alberto Fernández dialogó con industriales, trabajadores y trabajadoras y jóvenes del municipio bonaerense de San Martín, donde recorrió la empresa Tocki Textil. “Yo represento los intereses de los que menos tienen”, destacó el mandatario en el Club Ferrocarril Mitre. Junto a él estuvo Victoria Tolosa Paz, primera candidata a diputada por la provincia de Buenos Aires del Frente de Todos, y las también candidatas a diputadas Marcela Passo y Micaela Morán.
Fernández no se pronunció por el asesinato que captó la atención de todos los medios de comunicación y marcó la agenda del día. También estuvo acompañado por el ministro de Obras Públicas, Gabriel Katopodis; el intendente Fernando Moreira, y la secretaria para la Integración Educativa, Cultural y Deportiva del municipio, Nancy Cappelloni.
Indignación, llanto y gases
El reclamo por mayor seguridad se extendió este lunes durante toda la tarde. Los manifestantes se concentraron minutos antes de las 19 frente al quiosco de Sabo, situado en Avenida de Mayo y Alvarado, donde colocaron flores y pegaron sobre la persiana metálica carteles con mensajes que expresaban sus reclamos y también de apoyo a la familia de la víctima.
Por la noche, la manifestación creció frente a la comisaría de Ramos Mejía y lanzaron piedras contra las fuerzas. La respuesta de la policía no se hizo esperar y reprimió con gases.
Bocinazos, cantos con insultos y consignas contra el oficialismo tanto nacional, provincial como municipal, fueron un común denominador de la protesta realizada en la céntrica avenida de La Matanza.
Tomado del brazo de uno de sus nietos, Pedro Sabo, padre de la víctima, encabezó la movilización que avanzó por Avenida de Mayo y de la que participaron también comerciantes de la zona.
Además, se sumaron familiares de otras víctimas de hechos delictivos cometidos en la jurisdicción, como parientes de la psicóloga Maria Rosa Daglio (56), quien murió en marzo de este año tras ser asaltada por “motochorros”.
“Lo único que pido es seguridad, nada más”, señaló Paula, la exesposa de Roberto, quien estuvo acompañada de dos de sus dos hijos que remarcaron que “todo el mundo amaba” a su padre y agradecieron el apoyo de los manifestantes.
“Venía a laburar de domingo a domingo, se levantaba a las siete de la mañana, desde hacía veinticinco años. El quiosco fue la vida de él”, expresó uno de los jóvenes.
“Un deseo de mi papá era, cuando hablábamos de la muerte, que esparcieran sus cenizas en el Monumental”, recordó con la voz quebrada por el llanto Nicolás, el menor de los hijos del quiosquero, quien eran fanático de River Plate. |
