Este miércoles, el arco opositor logró la aprobación en la Cámara de Diputados del proyecto de boleta única de papel y ahora deberá definirse en el Senado. Sin embargo, el disenso del Frente de Todos, el espacio mayoritario en el Senado y fuerza gobernante en el país, proyecta sombra sobre la factibilidad de la propuesta en el corto plazo.
Aún en el improbable escenario de un triunfo en el Senado, lo cual solo podría producirse si un puñado de legisladores oficialistas se da vuelta y apoya el proyecto opositor, el presidente Alberto Fernández podrá ejercer el derecho constitucional al veto.
Desde el oficialismo, el diputado del Frente de Todos Hernán Pérez Araujo (presidente de la comisión de Asuntos Constitucionales) defendió la continuidad de la boleta partidaria tradicional al sostener que "no hay evidencia empírica" de que el sistema electoral vigente facilite el robo de boletas o el fraude electoral en sus distintas variantes.
De esta manera, desestimó los argumentos que esgrime la oposición sobre el supuesto impacto positivo en términos ambientales que traería aparejado la reforma. "Acá hay muchos ambientalistas de cotillón que hablan de ambiente cuando les conviene. Respeto la militancia de organizaciones ambientalistas pero no creo que sea una preocupación de la clase dirigente", sostuvo, aludiendo a una supuesta hipocresía de sectores de la oposición.
En tanto, desde la oposición el diputado nacional de la UCR Facundo Manes sostuvo que el sistema de boleta tradicional partidaria que rige hasta la actualidad "se transformó en la peor expresión de la política clientelar", por lo que se expresó a favor del proyecto de Boleta Única de papel, con el fin de "derogar las viejas prácticas que favorecen a los mismos de siempre".
"Este papelito tiene sus falencias y nosotros nos involucramos porque queremos derogar las viejas prácticas que favorecen a los mismos de siempre", dijo al sostener la boleta que encabezó el año pasado como primer candidato de una de las dos listas de Juntos por el Cambio que compitieron en las PASO por la provincia de Buenos Aires.
En la misma línea, el diputado nacional del PRO Diego Santilli consideró que "se van a acabar los vivos de siempre", "acá no solo estamos discutiendo un instrumento de votación, sino un sistema que dotará de mayor equidad al sistema y dará solución a problemas de décadas, al problema de las boletas truchas, del voto cadena", puntualizó.
La boleta única permitirá votar la lista completa y utilizar, si así lo autoriza el sistema electoral provincial, el esquema BUP, pero se deberá hacer en boletas y urnas separadas; y se autorizará el voto por correo electrónico a los extranjeros, aplicado hasta 2019.
El rechazo del oficialismo fue puesto también de relieve durante las exposiciones de los funcionarios del Poder Ejecutivo durante el debate en comisiones.|
