Pese a los esfuerzos del Gobierno por bajarle el tono a la interna dentro del Frente de Todos, es sabido que el acuerdo con el Fondo Monetario Internacional profundizó la crisis y las diferencias entre los mandatarios nacionales.
En los últimos días, fueron los ataques al despacho de la vicepresidenta durante la sesión en Diputados los que desataron un nuevo argumento para cuestionar a la figura presidencial, y los principales dirigentes que responden al kirchnerismo lo dejaron en claro.
La vocera presidencial, Gabriela Cerutti aseguró que durante el suceso, Alberto Fernández le envió un mensaje por Telegram a Cristina Fernández de Kirchner y a su secretario privado con el objetivo de mostrarse a disposición ante los destrozos. Sin embargo, no obtuvo respuesta alguna.
"El Presidente de la Nación le envió un mensaje al Secretario Privado y a la vicepresidenta mientras estaban sucediendo los hechos", aclaró Cerruti y ante los pedidos de clarificación del periodismo, remarcó: "No, no tuvo respuesta", dijo la funcionaria durante la primera declaración pública sobre la relación entre el mandatario y su vice, hoy, más distante que nunca.
De todas maneras, aseguró que "Las relaciones personales son personales y las políticas son otra cosa, la coalición se mantiene unida dando las batallas que debemos dar", aludiendo a que la indiferencia se debe a un motivo personal y que por ende no afectaría la gobernabilidad.
A su vez, fuentes cercanas a Cristina Kirchner confirmaron a Noticias Argentinas que no hubo respuesta al mensaje, pero aclararon que la relación entre ambos es "normal". El enojo de la vice surgió porque tanto ella como los dirigentes que la acompañan entienden que "el Presidente debería haber repudiado el suceso de manera pública”.
A pesar de contar con los votos garantizados para el tratamiento de la negociación con el FMI en el Senado, tanto de la oposición liderada por JxC, como del oficialismo; aún no se sabe a ciencia cierta qué hará la vicepresidenta y los senadores que la respaldan.|