Lo que dejó el peor año de pandemia en la Argentina – Negocios & Política
 

Resumen 2021 |Lo que dejó el peor año de pandemia en la Argentina

Entre abril y agosto el país transitó la peor ola. A partir del avance de la vacunación, estas cifras se redujeron drásticamente. Reapertura de escuelas, viajes de egresados y reactivación del turismo frente al alerta por nuevas variantes, la suba de contagios y la puerta de ingreso a una tercera ola. ¿Qué nos deja el 2021?.
Valeria Druckmann
Sociedad
Valeria Druckmann
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Entre abril y agosto de 2021 el país atravesó la peor ola de la pandemia por coronavirus alcanzando valores diarios de más de 30 mil casos confirmados y 600 muertes, además de la ocupación en Unidades de Terapia Intensiva del 90% en algunas jurisdicciones. Estas cifras fueron decreciendo en paralelo al avance de la vacunación aunque se llega a fin de año con la preocupación por la variante Ómicron, que dio indicios de ser más contagiosa incluso que la Delta y su propagación podría revertirse solamente con la aplicación de la tercera dosis (de refuerzo).

La cantidad de contagios implicó el deceso de muchas personas, alcanzando un total anual mayor a 116 mil fallecidos. Si bien el sistema de salud estuvo muy tensionado no llegó a colapsar como sucedió en 2020 en Europa. Según las autoridades de Salud e investigadores del Conicet, la situación comenzó a cambiar a partir del mes de septiembre con el avance de la vacunación, período para el que un 63% de la población contaba con la primera dosis y un 42% había completado el esquema. Actualmente, el 83% cuenta con una dosis, el 70% completó el esquema y un 9% cuenta con la tercera dosis de refuerzo.

A su vez, el flujo ininterrumpido de vacunas permite cerrar el año 2021 con más de 90 millones de dosis recibidas y más de 73 millones aplicadas a todos los segmentos etarios, incluidos niños y adolescentes, pese a los pronósticos negativos de varios sectores opositores y de los medios de comunicación.

Restricciones y flexibilizaciones

Si bien se esperaba un contexto epidemiológico desalentador para marzo- abril,  mientras se esperaba el lento arribo de vacunas y la efectiva inmunización de la población, el 1 de marzo las escuelas del país retomaron la presencialidad escolar de manera progresiva con un esquema de cuidados, separación por burbujas y modalidad combinada (presencial/ virtual). 

Para el próximo año uno de los principales desafíos será la inclusión de unos 500.000 alumnos que abandonaron la escuela y la forma en que se recuperarán los contenidos, en el marco de las profundas desigualdades que puso en evidencia la crisis sanitaria. En este marco, el Ministerio planificó la entrega de unas 633.000 computadoras este año y para el 2022 tiene proyectado sumar otro 1,5 millones y totalizar así el reparto de 2.133.000 en dos años, además de libros de textos.

Paralelamente al inicio de la normalidad del sistema educativo en todo el país, al mes siguiente, el Gobierno dispuso un nuevo aislamiento estricto en las zonas de mayor riesgo epidemiológico. Comenzó a regir a partir del 22 de mayo y se fue flexibilizando conforme mejoraban los datos de incidencia (cantidad de casos por cada 100 mil habitantes), razón (comparación de los casos de los últimos 14 días respecto de los 14 previos) y ocupación de terapia intensiva. 

La etapa más crítica en los hospitales se dio entre mayo y julio, alcanzando el récord de pacientes con coronavirus en Unidades de Terapia Intensiva el 14 de junio con 7.969 personas internadas y con ocupaciones que en varias jurisdicciones superaron el 90%.

Esa cifra (7.969) representaba un 46% más que las 5.457 camas ocupadas que hubo el 14 de mayo de 2020, el récord de internaciones en UTI de pacientes con Covid-19 del primer año pandémico.

La vuelta de espectáculos masivos (como los partidos de fútbol o los mega recitales), el aforo al 100% en la mayoría de las actividades, la posibilidad de reunirse con familiares y amigos en las fiestas y la inminencia de las vacaciones de verano generan un ambiente de recuperación de la normalidad muy ansiada por toda la población.

El repunte de casos

Con el incremento de flexibilizaciones también se produjo un ascenso de casos registrados a finales de noviembre y el Gobierno nacional debió imponer un pase sanitario que comenzará a regir en todo el país a partir del 1 de enero. Algunas provincias ya lo implementaron, mientras que desde algunos sectores se opusieron, entre ellos: legisladores libertarios y macristas e incluso la Ciudad de Buenos Aires donde sólo regirá para eventos masivos.

Turismo

Fue uno de los sectores de la economía que logró repuntar de manera considerable con picos superiores a la prepandemia, récords de facturación en el Previaje, buenos números en la Feria Internacional de Turismo de Argentina, reconocimientos internacionales y altas reservas para el verano.

En esa evolución incidieron el descenso de casos de coronavirus a partir de septiembre; los incentivos para viajar por el país, las flexibilizaciones en provincias y fronteras, y la avidez de los argentinos por volver al turismo tras la cuarentena.

El año cierra con el turismo consolidado como uno de los pilares de la reactivación económica del país y, pese al avance de la variante ómicron en al menos cinco provincias, se mantiene latente la posibilidad de acumular para fin de año unos 100 millones de dólares del turismo receptivo, fundamental para el ingreso de divisas.|

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