Luego de la cumbre que llevaron adelante las principales figuras del PRO, la diputada nacional María Eugenia Vidal ratificó sus aspiraciones a presentarse en las próximas elecciones en 2023. “Yo ya lo he dicho, estoy trabajando para ser presidenta”, reconoció, aunque aclaró que “está mal hoy anticipar candidaturas y que ese ha sido un problema en Juntos por el Cambio”.
Seguidamente, Vidal destacó su recorrido en la política. “Tuve el honor de gobernar cuatro años la provincia donde vive el 40 por ciento de los argentinos y goberné otros cuatro años con Mauricio (Macri) en la Ciudad, es decir, que ya gobernamos a la mitad de los argentinos en esos ocho años y me gustaría trasladarlo al Gobierno Nacional”, justificó.
Sobre la interna
Vidal también se refirió a la seguidilla de cortocircuitos por luchas de liderazgos y armados electorales en el PRO, que provocaron que el ex presidente convocara a una reunión de urgencia entre los principales dirigentes del partido. Según Vidal, que fue una de las participantes de la cumbre que se realizó en el Hotel NH Plaza de Mayo, “se pusieron sobre la mesa los conflictos internos” y hubo “un compromiso para bajar las tensiones”.
En paralelo, sostuvo que durante el encuentro, “no hubo disculpas sino charlas” entre el mandatario porteño Horacio Rodríguez Larreta y la titular del PRO, Patricia Bullrich, sobre los diversos cruces que protagonizaron en los últimos días. Además, manifestó que hubo acuerdo en ofrecer una respuesta a la sociedad ante “la falta de planes serios por parte del Gobierno, que sólo pone parches”.
“Nos conocemos mucho. Entiendo que para muchos argentinos que quieren ver a la oposición unida y trabajando en lo que importa fue incómodo lo que pasó, pero no hay ninguna posibilidad de que el PRO ni Juntos por el Cambio se separe. Tenemos herramientas, vínculos y relaciones de años para resolver esta disputa”, marcó.|