Juan Grabois, líder del Movimiento de Trabajadores Excluidos y uno de los principales dirigentes sociales aliados al Frente de Todos, amenazó con abandonar la coalición oficialista por la "tensión y decepción" que sintió ante la conformación de las listas de cara a las elecciones PASO, que cierran este sábado.
Al respecto, dijo que si él no puede “cumplir esa misión” considera que no podrá aportar mucho más a la política institucional. En ese sentido, reconoció: “No nos ha ido bien por ahora y nuestro espacio deberá hacer una evaluación colectiva".
Hasta el momento fue el dirigente que más crítico se mostró, desde las organizaciones sociales y barriales, ante la inacción de ministros como Martín Guzmán y Matías Kulfas.
Lo que está pasando
En las primeras horas de la tarde del 23 de julio circuló que Grabois decidió abandonar las negociaciones que mantenía con dirigentes como el titular de la bancada oficialista en la Cámara baja, Máximo Kirchner, así como también con Andrés “Cuervo” Larroque, ministro de Desarrollo de la Comunidad bonaerense, y dejó en su lugar al diputado nacional por la provincia de Buenos Aires Federico Fagioli.
Desde su entorno, afirmaron que la pelea del dirigente social apela a la incorporación de más representantes de los movimientos sociales y de los trabajadores en las listas de candidatos. Todo este tiempo su gran apuesta fue fortalecer al oficialismo en las legislativas, desde los movimientos sociales y organizaciones barriales, pero no pudo verse reflejado en los municipios, donde los precandidatos actuales fueron nombrados por los mismos intendentes que eligen a personas de su confianza con vista a las elecciones de 2023.
Grabois le pidió tanto a Alberto Fernández como a Cristina Kirchner que salgan por ley el Salario Básico Universal (SBU), pero tampoco obtuvo resultados positivos.
De darse la ruptura, el Gobierno deberá tomar conciencia de que el equilibrio político que creía mantener con las organizaciones sociales está en peligro.|