Luego de una semana cargada de versiones, el ministro de Seguridad bonaerense, Sergio Berni, se mostró con el gobernador provincial, Axel Kicillof, el ministro de Seguridad de la Nación, Aníbal Fernández y Martín Isaurralde, en un acto oficial y quedó despejada su continuidad en el cargo más allá de las elecciones, luego de que el propio funcionario lo pusiera en duda en declaraciones periodísticas.
La tensión política
Según dejaron trascender desde el entorno de Berni, el funcionario habría calificado como "cachivache" al Frente de Todos y tenía intenciones de abandonar no sólo su cargo en el Gabinete provincial sino además la coalición oficialista.
Berni ya venía manifestando abiertamente sus diferencias de criterio en materia de seguridad no sólo con funcionarios nacionales sino también con intendentes y hasta habló de un enfrentamiento muy tenso con el líder de La Cámpora, Máximo Kirchner, a quien le habría reprochado la táctica electoral por no avalar las internas en las PASO del Frente de Todos.
El líder de La Cámpora no es el único que piensa que Berni debe dejar el cargo, ya que el dirigente dice que tiene el apoyo del jefe de Gabinete de la provincia de Buenos Aires Martín Insaurralde, que planteó la posibilidad de desplazar al ministro de Seguridad bonaerense. A esto se le suma el apoyo de varios intendentes que no coinciden con la tarea del funcionario, critican su exposición pública y plantean que “no resuelve” el problema de la inseguridad que afecta a los municipios.
Por su parte, Cristina Kirchner mantiene el respaldo al ministro de Seguridad de la provincia de Buenos Aires, ya que considera que ocupa un espacio en un tema donde el oficialismo “hace agua”. Mientras que el gobernador bonaerense no quiere más cambios en su Gabinete hasta las elecciones legislativas del 14 de noviembre, aunque sabe de la presión para echar al funcionario.
La respuesta de Berni
En una entrevista televisiva reciente, consultado sobre una posible ruptura con el Frente de Todos, Berni contestó: "Hablemos después de las elecciones".
La confesión de las dudas sobre su continuidad en la cartera de Seguridad hizo sonar las alarmas en La Plata, y el propio gobernador se puso al hombro la tarea de convencerlo para que se quede más allá de las elecciones y del resultado electoral.
Una de las razones que estaría inclinando la balanza por la continuidad de Berni en su cargo en 2022 es su vínculo con Cristina Kirchner, a quien considera su conductora política.
En diálogo con NA, fuentes cercanas a Kicillof aseguraron que "nunca Berni le manifestó al Gobernador esa supuesta intención de renunciar después de la elección".
"Lo que demostró el acto de hoy es que seguimos trabajando y planificando el 2022", y remarcaron: "Nosotros estamos conformes con su trabajo y planificando el 2022".|