En el marco de la reunión del Comité Federal de Transporte, representantes de las provincias trataron como principales ejes la distribución equitativa de subsidios nacionales, la previsión en las fechas de pago, los criterios de distribución y el fortalecimiento institucional de COFETRA como Consejo Federal permanente.

El plenario contó por primera vez con la presencia de autoridades de Transporte de todas las provincias; además de la Asociación Obrera de la Industria del Transporte Automotor (Aoita) y representantes de la Federación de Empresarios del Transporte Automotor de Pasajeros (Fetap) y la Asociación de Empresarios del Transporte Automotor de Córdoba (Asetac).

Al finalizar el encuentro, las autoridades presentes suscribieron una Declaración de Principios, Objetivos y Funciones del Comité en la que apelan al Gobierno nacional a que se “iguale el trato en la distribución de los recursos en toda la República Argentina a fin de lograr la solución a los problemas que les son comunes”.

En el documento quedó expresada la “necesidad de la conformación, por parte de Nación, de ámbitos e instrumentos en el que se garanticen la previsibilidad en los montos, plazos y criterios de distribución de los recursos económicos y técnicos” y se manifiesta que “desde el Comité se harán cumplir los principios que rigen los servicios públicos, para evitar cualquier tipo de interrupción que ponga en riesgo la continuidad de la prestación”.

Durante el encuentro, una de las voces más enfáticas fue la del sanjuanino Sergio Uñac, quien manifestó al respecto, “es hora de terminar con la desigual distribución de subsidios al transporte entre AMBA y el resto de las provincias, que sólo provoca caos en un servicio público esencial”.

Y sentenció en ese sentido, “cuando vemos que el AMBA recibirá más de 210 mil millones anuales en subsidios al transporte mientras que el resto de las provincias recibiremos 46 mil millones por año, está más que claro que el desequilibrio es total”, y pidió a Nación “barajar y dar de nuevo” en ese reparto porque “hay argentinos de primera y argentinos de segunda categoría”.

Tras el naufragio del presupuesto nacional 2022, que contenía un aumento en los subsidios para el transporte del interior, el Gobierno nacional se comprometió a mantener ese compromiso por decreto para llegar a una remesa anual de $ 46 mil millones. En 2021 ese monto había sido de exiguos $ 27 mil millones, contra $ 170 mil millones del AMBA.

En esa línea, Nación definió en febrero el envío de $ 3.200 millones mensuales para el primer trimestre, un esquema que “se mantiene”, bajo la intención de “cubrir lo que se había definido en el presupuesto nacional”. Pero ese volumen está hoy lejos de acallar las quejas de las provincias, que ya pidieron un aumento en las remesas.|