Puertas adentro y hacia afuera el mensaje de Alberto Fernández respecto de la suspensión de las PASO es el mismo: la única manera de lograrlo es mediante un acuerdo amplio entre el oficialismo y la oposición. Se trata nada más y nada menos que de modificar las reglas en un año electoral, un costo político que la Casa Rosada no está dispuesta a pagar.

Con el aval de 19 de los 24 gobernadores y el guiño del Presidente con el envío del proyecto al Congreso, solo resta lo más difícil, conseguir un acuerdo que a esta altura parece imposible y que la iniciativa se pierda por los pasillos del Parlamento.

Este miércoles, el ministro del Interior Eduardo “Wado” De Pedro recibió a los gobernadores de Chaco Jorge Capitanich, de Corrientes Gustavo Valdés y de Jujuy Gerardo Morales y uno de los temas –como era de suponer- fue el de la suspensión de las PASO. El mensaje que emitió el funcionario fue el mismo que el del Presidente: buscar consensos, principalmente en lo que respecta a los mandatarios de la oposición.

En Argentina hay cuatro gobernadores de Juntos por el Cambio y tres posturas diferentes respecto a las elecciones primarias este año. Por un lado Morales y Valdés militan desde hace un buen tiempo la suspensión de los comicios por única vez. Mientras que el mendocino Rodolfo Suárez sostiene que donde haya competencia, se sostengan las PASO y donde no, que se eliminen. En tanto que Horacio Rodríguez Larreta está en contra de suspender los comicios.

Ante este complicado panorama, los dos gobernadores que respaldan la suspensión, y que estuvieron en la Casa Rosada liderarán la avanzada y hablarán con el jefe de Gobierno porteño para intentar convencerlo que el mejor camino a seguir es bajar las primarias, aunque sea por única vez teniendo en cuenta el contexto.

Los dos mandatarios de la UCR quieren dar la pelea en el frente opositor y rosquear en una situación adversa. Saben que el probable resultado es negativo, aunque prefieren no quedarse con la opinión atragantada y en los días que vienen van a poner el tema sobre la mesa.

En Juntos por el Cambio la postura se mantiene y sostienen que no se pueden cambiar las reglas electorales en el mismo año en el que se realizan. Cabe recordar que el año pasado, cuando el tema fue instalado por los gobernadores peronistas, la alianza que gobernó hasta el 2019 emitió un comunicado en el que apuntaban contra el peronismo por querer modificar el cronograma electoral. Ahora quienes también quieren hacerlo están adentro del espacio.

En el PRO, muy cerca de Rodríguez Larreta, sostienen que la posición del jefe de Gobierno porteño no se modificó y aseguran que “es muy difícil” que la cambie. Sin embargo, abren una pequeña puerta para tratarlo.

Mientras que en la Coalición Cívica son terminantes. No hay margen para tratar la suspensión de las PASO. No se pueden cambiar las reglas en el año electoral, sea quien sea quien pida esa modificación. Si es necesario, darán la discusión interna con los gobernadores, pero están plantados en una postura muy definida.

En Corrientes, Valdés tiene pensado anunciar dentro de poco tiempo el desdoblamiento. En esa provincia se elige gobernador –el radical buscaría la reelección- y, tradicionalmente, se suelen adelantar los comicios para no hacerlos coincidir con los nacionales. En Jujuy, Morales va a extender la definición sobre el calendario electoral hasta tener más certezas sobre el escenario sanitario de su provincia, donde hay un rebrote de casos de coronavirus. |