“Mentiroso”, “estafador”, decía el ex ministro de Economía, Domingo Cavallo refutando a José Ignacio de Mendiguren, ex Ministro de Economía de la Alianza, en el vigésimo aniversario de la renuncia de Fernando de La Rúa a la presidencia. Cada uno con su argumento, acusó al otro de la responsabilidad que tuvo frente a la crisis del 2001.
“Muchos de los que empujaban la desestabilización en ese momento, lo que querían era el abandono total de la convertibilidad y pesificar compulsivamente los depósitos y los préstamos. Esa gente no estaba conforme con (Adolfo) Rodríguez Saá”, recordó Mendiguren como la única razón de que se produjera la desestabilización económica, política e institucional en la Argentina.
A su vez, el padre de la convertibilidad le refutaba a su interlocutor la responsabilidad de la pesificación asimétrica que tuvo durante el gobierno de Eduardo Duhalde, ocasionando una batahola entre ambos que repercutió en el estudio del programa de A Dos Voces, en TN. “Los que empujaban todo eso iban a hablar con Alfonsín y con Duhalde porque sabían lo que querían. Pero Alfonsín y Duhalde no entendían bien y creían que, con el abandono de la convertibilidad, iban a aumentar los salarios e iba a disminuir la desocupación y la pobreza", explicó.
"El plan era pesificar, porque de esa forma, todos los que estaban endeudados en dólares, las grandes empresas que representaba De Mendiguren, iban a licuar sus pasivos”, confesó Cavallo a lo que recibió un retruco del ex titular de la Unión Industrial Argentina en tiempos de Carlos Menem: “Cavallo, ¿está hablando en serio o cree que somos bobos? Me parece que tiene fiebre, Cavallo, a usted lo traiciona el subconsciente. Cavallo. Usted es un mentiroso y está mal de la cabeza” y agregó: “¿No se conmueve al ver los muertos que provocó?".
“El que dio un seguro de cambio a todos sus amigos empresarios de la Mediterránea en el '82, y le perdonó las deudas, y el Estado se hizo cargo, fue Felipe Domingo Cavallo (sic)”, continuó Mendiguren a lo que su rival explotó: "Sos un mentiroso, un lobbysta", le gritó Cavallo, sin corregir su nombre. "No te cree nadie, Mingo, pero mirá lo que provocaste, dejá de mentir”.
Invitados que se encontraban en el estudio como los dos ex presidentes Rodríguez Saá y Ramón Puerta, sintieron el fervor entre ambos por viejos rencores y figuraron como meros expectadores: "Vos tendrías que estar preso, porque pusiste un sistema bimonetario de curso legal, sin prestamistas de última instancia. Sabías que cuando había una corrida no podías pararla. Por eso paraste los bancos. Caradura. Calmate, Domingo, contestá lo que te estoy diciendo. No podés", desafió De Mendiguren.
Cavallo, en gran parte porque sus palabras chocaban con las de su interlocutor, llevó la conversación a un terreno en el que intentó exponer algunas credenciales. "Me metieron preso y me liberaron porque 60 personalidades del mundo, incluyendo 4 premios Nobel, firmaron una solicitada en mi defensa, y por eso se asustaron y me dejaron en libertad".
Tan caldeado fue el encontronazo que, mandaron a un corte comercial para calmar a los dos contrincantes dialécticos que discutían como si no hubiesen pasado 20 años de la crisis más grave que vivió el país.|
