El Gobierno nacional volvió a prorrogar la intervención de la Agencia Federal de Inteligencia (AFI), y mantuvo en su cargo a Cristina Caamaño. La nueva intervención se mantendrá por otros 180 días corridos.

La medida fue publicada en el Boletín Oficial con el decreto 987, que lleva la firma del presidente, Alberto Fernández, y del jefe de Gabinete, Santiago Cafiero.

Ésta es la segunda prórroga que tiene la intervención del organismo de inteligencia. La primera había sido en junio último.

En los considerandos se señala que "se han comenzado a disponer modificaciones esenciales para consolidar un paradigma que, en materia de inteligencia, permite rendir cuentas ante la sociedad y expone los principios de publicidad, transparencia, eficacia y eficiencia como bases de la reformulación que se requiere". 

El decreto destaca la importancia de "reducir las partidas confidenciales al mínimo indispensable y generar un programa de rendición de cuentas, lo que se vislumbra sobre la base de la publicidad de la información presupuestaria", señala.

Desde que asumió, Camaño dispuso la disolución de la figura del subdirector y estableció el fin de los "alias" para los agentes que no sean de campo. 

Cuando una persona entraba a la ex Side recibía un alias que lo acompañaba toda su carrera. Ahora no podrá tener ningún nombre supuesto el personal afectado a la Dirección General, a la Dirección de Comunicación e Información Pública, a la Dirección de Asuntos Internos, a la Unidad de Auditoría Interna, al Gabinete de Asesores y a la Escuela Nacional de Inteligencia. 

Según la nueva estructura, sólo el personal de inteligencia  y algunos de los de seguridad podrán mantener la identidad secreta, pero el personal de apoyo trabajará con su nombre propio.