Conforme a la posible llegada de una segunda ola de contagios al país, el Gobierno está analizando determinadas medidas con el fin de que la situación epidemiológica no empeore. El Ejecutivo prepara un Decreto de Necesidad de Urgencia (DNU) con restricciones y redución de la frecuencia de los vuelos al exterior.
El nuevo DNU propone desalentar el turismo, controlar con mayor rigurosidad a los argentinos que están bajo cuarentena una vez que regresan al país y minimizar los cruces informales en las fronteras con Brasil y Bolivia estableciendo una mayor presencia de la Gendarmería y la Prefectura.
Los principales puntos:
- Cada pasajero deberá pagarse su propio test de PCR y su alojamiento de confinación de modo obligatorio.
- Además, no está permitido el ingreso de extranjeros, las fronteras terrestres están actualmente cerradas, y hay solicitud de PCR de hasta 72 horas previo al embarque.
- Serán incluidos de los funcionarios de la aduana y migraciones que trabajan en las fronteras nacionales como personal esencial.
- La orden estatal es que los controles a los camiones que transportan materiales de comercio de exportación o importación deberán ser absolutamente rigurosos.
- Por el momento, se descarta la restricción de la circulación entre provincias o ciudades del mismo distrito nacional.
El borrador DNU se encuentra circulando por diversos ministerios para su análisis, antes de ser publicado en el Boletín Oficial y se presume que será difundido en los próximos días.
“El mayor objetivo es desalentar el turismo y dejar los vuelos al exterior en un mínimo indispensable”, dijo el presidente Alberto Fernández.
También afirmó que, entre el martes y el jueves de la semana próxima, arribarán tres millones de dosis de la vacuna china Sinopharm. Aunque las fechas y las cantidades son aproximadas, ya que solo pueden darse por confirmadas cuando el material está embarcado y en vuelo.
Por otra parte, el director de la OMS (Organización Mundial de la Salud), Adhanom Gebreyesus, afirmó que: "a menos que se tomen medidas serias, la tendencia ascendente que ahora inunda el sistema de salud" en Brasil terminará por superar "su capacidad y provocará más muertes”. Y agregó que el desborde "afectará a los países limítrofes". |