Casi pasó una semana de la derrota electoral del Frente de Todos y aunque parezca mentira ya comenzó la carrera hacia el 2023. El acto albertista del miércoles marcó un antes y un después en las intenciones del oficialismo de cara a la próxima contienda electoral, es que el propio Presidente pateó el tablero y pidió las PASO para definir al próximo candidato presidencial.
En ese juego los gobernadores cumplirán un rol fundamental. Incluso antes que el Presidente, quien advirtió la intención de ir a las PASO, hablando de “institucionalización” en el Frente de Todos fue el gobernador de Chaco, Jorge Capitanich.
Con la espalda ancha luego de haber dado vuelta la elección después de perder en las Primarias por 10 puntos, el líder chaqueño planteó la necesidad de ir hacia un proceso de consolidación del espacio oficialista para evitar problemas internos y remarcó, "el Frente de Todos necesita institucionalidad porque si no eso promueve dispersión y atomización y eso es un riesgo", y declaró que "es necesario pensar que la elección de 2023 está a la vuelta de la esquina y esto implica que el compromiso de trabajo empieza hoy y, en ese sentido, las primarias abiertas, obligatorias y simultáneas deben ser garantizadas".
El ex Jefe de Gabinete de Cristina Kirchner manifestó que las PASO son importantes "para que tengamos la fortaleza del liderazgo de los candidatos presidenciales que emerjan en esa disputa política dentro de nuestro espacio", planteó y añadió que es muy importante tener Primarias, "con la institucionalización del Frente, con el objeto de garantizar fortaleza en quienes efectivamente surjan elegidos por la voluntad popular, teniendo institucionalización, tenemos una plataforma en común y tenemos quienes efectivamente pueden liderar".
Otros de los gobernadores peronistas que hizo referencia al tema fue el riojano Ricardo Quintela, quien analizó que la sociedad no puede acompañar a una propuesta que fundió al país y que hizo los grandes negociados de quienes forman parte del establishment, "si tenemos la propuesta que contenga a la mayor cantidad de referentes posibles, el proceso de unidad tiene que ser superior a las diferencias" y planteó que se debe "llamar a gobernadores que son importantísimos y buscar la unidad de todos los sectores, lo que tenemos que erradicar son las posiciones radicalizadas, tenemos que ser lo suficientemente flexibles para sentarnos a conversar".
También hizo alusión personalmente al gobernador de Córdoba, Juan Schiaretti, y comentó, "tenemos que conversar con Schiaretti y conversar para que tenga la actitud para conversar con el Presidente y buscar un camino que podamos caminar todos".
Quintela manifestó que pretenden lograr gran encuentro de todos los que pertenecen al espacio político, para así poder conversar de temas acerca de cómo se vinculan los intereses del movimiento y los procesos necesarios con los demás sectores y agregó "tenemos que empezar a charlar sobre cómo construimos el camino para sacar el país hacia adelante".
Por su parte, el gobernador de Tierra del Fuego, Gustavo Melella, otro de los que revirtió los resultados de las primarias en las que había perdido por 4 puntos frente a Juntos por el Cambio y ganar con 10,69% de diferencia, afirmó que se logró “por el trabajo y la unidad del Frente de Todos”, y consideró que “se sintieron las medidas del Gobierno nacional desde las PASO hasta acá". Sobre la oposición alertó que “hay gente que es seria y tiene honestidad intelectual, y otros con mucha irresponsabilidad que sólo responden a determinados grupos de poder”.|