Las primarias legislativas significaron un fuerte revés para el Gobierno frente al caudal de votos que obtuvo la alianza de Juntos en la mayoría de las jurisdicciones del país. Los resultados, que funcionan como un sondeo de cara a las elecciones de medio término, muestran un giro hacia la centro-derecha de un porcentaje importante de la población.
El anticipo de los resultados que pueden marcar el escenario legislativo el próximo 14 de noviembre, cuando se renovarán 127 de las 257 bancas de la Cámara de Diputados y 24 de las 72 del Senado, genera un “escenario catastrófico para el gobierno”, según dijo a la agencia AFP el politólogo Carlos Fara. “Con estos números la perspectiva es que el triunfo opositor debería consolidarse dentro de dos meses”, afirmó.
El especialista no dudó al señalar que es un “castigo” para el gobierno, y que “estos resultados reflejan que la mayoría prefiere que el gobierno pierda las elecciones legislativas, si bien falta ver qué ocurrirá finalmente en noviembre”.
Además, marcó que “el principal tema de preocupación de la gente es la economía y es el tema peor evaluado del gobierno, aunque el manejo de la pandemia con la vacunación lo estabilizó”.
En las próximas elecciones, la coalición de gobierno pone en juego la mayoría que actualmente tiene en el Senado, mientras que, en la cámara baja buscaría aumentar diez bancas luego de dos años de legislar en minoría.
Al respecto, Orlando D'Adamo, del Centro de Opinión Pública (COPUB) de la Universidad de Belgrano, al analizar os resultados de las PASO, sostuvo que "por la dimensión” las cifras representan “no sólo una derrota cuantitativa sino simbólica para el Gobierno" y agregó que, "en especial, da cuenta de esto el resultado en la provincia de Buenos Aires y en distritos históricamente peronistas".
Entre las causas de los resultados encontró que, "a la crisis económica, se sumaron las imágenes de los privilegios de la clase política, con escándalos como el 'vacunatorio VIP' o 'la foto de Olivos', que conformaron un cóctel explosivo".
Distribución de la derrota
A raíz de la magnitud de la derrota y dada la peculiar dinámica de la fuerza gobernante, D'Adamo explica que "no se le puede endosar el fracaso únicamente al presidente Alberto Fernández, salvaguardando al resto del Frente de Todo, en particular, a la vicepresidenta Cristina Fernández de Kirchner".
En ese sentido indicó que "la derrota amplía las grietas internas con una profundidad que sólo los días y los resultados de noviembre permitirán mensurar. Se abre, en el oficialismo, una seria duda respecto del candidato o candidata para el 2023, ya que los nombres que se venían barajando quedarán asociados a estos resultados y afectarán negativamente sus posibilidades".
Por el lado de la oposición, en cambio, el director del COPUB advirtió que "el primero que salió fortalecido es el jefe de Gobierno porteño, Horacio Rodríguez Larreta, ya que su ingeniería electoral fue la que triunfó y, de confirmarse esto en noviembre, se perfila como el candidato más fuerte para 2023".
No obstante, el especialista en Comunicación Estratégica de la UB concluye que estas PASO dejan varias incógnitas abiertas: "¿Recuperará el oficialismo para noviembre algunos de los votos que cedió entre 2019 y 2021? ¿Logrará la oposición sostener o aumentar estos porcentajes para la elección general? Y, en ambos casos, ¿qué estrategias elegirán para lograrlo?".|