Nuestro país es uno de los más inflacionarios del planeta, de hecho, tenemos el tercer puesto del podio detrás de Venezuela y Sudan. Está claro que el estado tiene que estar donde se lo necesite, pero de manera inteligente y proactiva.
En ese sentido, tener un Plan real de inclusión socioeconómica es fundamental, y el en proceso o lapso de tiempo que la ayuda llegue a los más necesitados, es bueno que el Gobierno extienda una mano, a través de nuestros impuestos, a quienes hoy están excluidos y marginados. Pero ojo. esa ayuda se puede convertir en veneno si no va acompañada de acciones de reinserción en el plano socio-económico.
Por eso, es esencial comprender que la solución real a la depreciación del salario real, la Inflación y el hambre, viene de la mano de mayor producción, del trabajo enfocado y la generación de nuevos emprendedores que construyan nuevas marcas personales y Pymes que, por cierto, representan el 99.8% de las empresas y emplean el 66% de los recursos disponibles en nuestro país. La creación de trabajo genuino y de alta calidad provienen del emprendedurismo y deberíamos de impulsarlo como una política de estado.
Solo generando más ingresos se le puede ganar a la inflación
Para este año se habla de una inflación del 40% o superior y, como mínimo, será del 55%. Cualquier producto financiero va a dar menos que eso por lo que no se le podrá ganar a la inflación por ese camino. Solo generando más ingresos se le puede ganar a la inflación.
Hay muchos economistas que aconsejan poner el dinero en plazos fijos, pero es una de las peores inversiones, al igual que los alquileres de propiedades. Hablamos de un porcentaje de alquiler que está por debajo del 1 (el 0,2 promedio), por ciento del valor real de la propiedad y los intereses de los plazos fijos tampoco la equiparan.
Otra cosa que no aconsejo son los Fondos Comunes de Inversión, porque la gestión de esa inversión no depende de nosotros. Le damos el dinero a otros que compran bonos y acciones de compañías que, en algunos casos, inflan los balances para que sus CEOs se lleven mejores bonificaciones y utilidades y después esas acciones vuelven a caer. O las criptomonedas, que no sabemos quién está detrás, ni cómo las manejan.
En el caso de la inversión hay dos formas de hacerlo, continuó: quienes juegan a empatar o no perder, y siempre pierden; o los que juegan para ganar y por lo general ganan porque invierten en investigación, en tiempo, en saber lo que tienen que hacer o no.
Por eso, la persona que tenga algún tipo de excedente inutilizado, algún ahorro, adquiera activos que es lo mejor para estos casos. En general obtenemos pasivos pensando que son activos. Por ejemplo: un auto que no sea para trabajar y lo usemos solamente de paseo, es un pasivo, no nos pone dinero en el bolsillo, solo nos saca.
Por último, hay que tener claro que la manera de ganarle a la inflación es ganando mucho más dinero. Parece una obviedad, pero es una realidad y la única forma es creando un negocio, ser dueño de una marca, o mejorando los ingresos que ya tenemos. De esta manera podemos tener riqueza y patrimonio real. Nuestra propia marca y trabajar por nuestros propios sueños.|
*Daniel Adler, especialista en Educación Financiera y Emprendedurismo.