El sistema financiero argentino está sólido y la liquidez se encuentra en uno de sus niveles más elevados en términos comparativos, alrededor del 90% para los depósitos en dólares del sector privado.
De los U$S 17.300 millones de depósitos privados en entidades bancarias, cerca de U$S 12.000 millones se encuentran “encajados” en el Banco Central con carácter de intocables aunque en la contabilidad suman para las reservas de la entidad, y U$S 3.000 millones disponibles inmediatamente en los bancos.
Moodys, calificadora de riesgo corporativo y soberano, destacó los elevados niveles de liquidez del sistema bancario local, descartando cualquier riesgo para los depósitos en dólares dentro del mismo.
El sistema financiero argentino, aunque sometido a un importante nivel estrés con fuertes devaluaciones desde fines de mayo del 2018 hasta la implementación del control de cambios en octubre de 2019 y restricción para la compra de dólares con fines de ahorro, muestra niveles de solvencia y liquidez suficientes para responder sin sobresaltos al retiro de depósitos en dólares.
El colapso de la convertibilidad, la fenomenal crisis provocada por la implosión de aquel sistema en 2001 a partir de un régimen bimonetario en el cual los bancos otorgaron créditos en dólares contra depósitos en pesos convertibles, dejó una importante lección para el futuro: no repetir los errores del pasado.
Y fue exactamente lo que ocurrió, el sistema financiero no volvió a cometer aquel gravísimo error que generó el descalce de monedas entre depósitos y créditos en los bancos, y es por este motivo que frente a los rumores y al riesgo de un efecto estampida, el sistema muestra niveles de solvencia y liquidez suficientes para responder sin sobresaltos al retiro de depósitos.
El sistema muestra niveles de solvencia y liquidez suficientes para responder sin sobresaltos al retiro de depósitos
¿En qué se basa la fortaleza del sistema financiero en la actualidad?
a) Elevados encajes sobre los depósitos en dólares en el Banco Central, permite un nivel de respuesta frente al retiro de depósitos a la vista, que representan actualmente el 70% del total del sistema.
b) Bajo riesgo de descalce de monedas dentro del sistema entre depósitos y préstamos en dólares, dadas las regulaciones se orienta el crédito en moneda dura hacia empresas con ingresos por facturación en dólares, fundamentalmente pre-financiación de exportaciones.
c) Baja exposición de las entidades a préstamos en moneda dura, a partir de la disminución de depósitos desde 2019, los créditos en dólares disminuyeron aun en mayor proporción.
La inestabilidad lamentablemente crónica de la macroeconomía argentina llevó a las entidades bancarias a posiciones mucho más conservadoras en los últimos años frente a un pasado traumático con el colapso de la convertibilidad hace dos décadas, lo que contribuyó junto con las regulaciones posteriores, a la propia fortaleza del sistema financiero argentino en la actualidad.
*Hugo Vásquez, Licenciado en Economía.