El “flippening” es una cuestión de tiempo, aseguran los desarrolladores y entusiastas más importantes de la red Ethereum. Ese concepto se refiere a la posibilidad de que Ethereum supere a Bitcoin como la mayor criptomoneda. Si bien ello puede medirse mediante la utilización de distintas métricas, la más importante es la de capitalización de mercado de cada criptomoneda y hoy la relación ETH/BTC ronda el 34%.

La diferencia reside en su concepción. Mientras que Bitcoin fue ideado en 2008 como un sistema de efectivo electrónico usuario a usuario, 5 años más tarde Ethereum fue concebido como la próxima generación de contratos inteligentes y una plataforma de aplicaciones descentralizadas.

Dicen que las comparaciones entre hermanos son odiosas y que en la mayoría de las ocasiones son motivadas por los padres. Si bien este caso no es la excepción, Bitcoin está llamado a ser “esencialmente un sustituto del oro en lugar del dólar”, en palabras del presidente de la Reserva Federal Jerome Powell, mientras que Ethereum es una blockchain (o cadena de bloques) con un lenguaje de programación Turing completo que se usa para crear contratos inteligentes.

Simplemente escribiendo la lógica en líneas de código, los contratos inteligentes se constituyen en acuerdos entre dos o más partes en donde una vez definidas las reglas y condiciones, las consecuencias se ejecutan de manera autónoma y automática.

Estos contratos inteligentes que corren sobre aplicaciones descentralizadas (aplicaciones mediante las cuales los usuarios interactúan y se ejecutan los acuerdos sin la intervención de una entidad central que gestione el servicio) en la red Ethereum han creado hasta el día de hoy numerosos productos y servicios que mejorarán nuestras vidas.

Una de las áreas que emergió gracias a la creación de las monedas estables que buscan paridad frente al dólar estadounidense como el USDT o el USDC (respaldas por dólares depositados en cuentas bancarias) o por DAI (respaldado por criptomonedas como el ETH que valen más que el DAI) fueron las finanzas descentralizadas o “DEFI”.

DEFI es una alternativa al sistema financiero tradicional, que basada en tecnología de código abierto que cualquiera puede programar, ha creado innumerable productos y servicios donde cualquier usuario con conexión a internet y que posea ETH (la moneda de Ethereum) puede financiar o pedir prestado y realizar operaciones de trading y financieras básicas o avanzadas como cobertura, apalancamiento, operaciones de futuros y derivados y todo a través de los mencionados contratos inteligentes.

Imagínese cuan fascinado estaría Peter Drucker, el padre de la Administración, analizando el surgimiento de las organizaciones autónomas descentralizadas (DAOs) en contraposición con las organizaciones tradicionales. Las DAOs son organizaciones sin un liderazgo centralizado donde todas las decisiones respecto de las reglas establecidas en los contratos inteligentes se toman por consenso. Cualquier usuario que posea una participación en la DAO, mediante el token correspondiente, puede votar sobre la gestión, futuro o cualquier cambio que se requiera efectuar. Las actividades son transparentes y totalmente públicas y los resultados de la votación se implementan automáticamente sin intervención de intermediarios. Hoy muchas plataformas de DEFI toman sus decisiones a través de sus DAOs, otorgando vos y voto a sus usuarios.

El arte digital y los coleccionables llegaron a blockchain de la mano de los NFTs. De acuerdo con el sitio www.ethereum.org los NFT son tokens que podemos usar para representar la propiedad de elementos únicos. Permiten tokenizar cosas como arte, objetos de colección e incluso bienes inmuebles. Solo pueden tener un propietario oficial a la vez y están protegidos por la red de Ethereum donde nadie puede modificar el registro de propiedad, o copiar/pegar un nuevo NFT para que exista.

En un programa de televisión de 1999 David Bowie, legendaria estrella de Rock, hablaba sobre los inimaginables efectos que Internet iba a tener en la sociedad. Ante la pregunta por parte del entrevistador si Internet no era solo una herramienta, la respuesta del cantante fue contundente “es una forma de vida extraterrestre”.

El misterio sobre el creador de esta tecnología y la increíble evolución que ostenta el ecosistema hacen pensar lo mismo. |