El reclamo gremial del sindicato de choferes Camioneros, mantenía paralizado uno de los centros de distribución de la ex Walmart, que fue adquirida por Dorinka SRL, con sus 92 sucursales, sobre finales del año pasado.

Desde mediados de marzo, cuando los nuevos titulares de la compañía se dispusieron a iniciar actividades, la relación con unos 500 trabajadores afiliados al gremio de Camioneros se tensionó, ante el pedido de doble indemnización de los empleados, aunque se los mantendría en sus puestos de trabajo.

Luego de una larga negociación que encabezó el líder del gremio, Pablo Moyano, con encuentros y desencuentros en las oficinas del Ministerio de Transporte de la Nación, y que incluyó la denuncia de “extorsiones” por parte de la firma del Grupo del empresario y ex diputado, acordaron el pago de una “compensación indemnizatoria”.

EL lues en las oficinas de Trabajo, ubicadas en Callao al 100, los dirigentes gremiales y las autoridades de la compañía, llegaron a un acuerdo monetario. “Se trata de sumas no remunerativas que no pueden ser consideradas como indemnización”, explicó a N&P un funcionario de la cartera de Claudio Moroni.

La compensación indemnizatoria implica un desembolso de alrededor $200 millones que se repartirá en cuotas y de acuerdo a la antigüedad de los 510 trabajadores.

Desde el gremio indicaron que, en promedio, los trabajadores -que mantendrán su antigüedad-, recibiría alrededor de $400 mil, en cinco cuotas, y a modos de “gratificación”.

Conflicto

A mediados de marzo, la empresa que adquirió las acciones de Walmart, denunció que fue “victima de extorsiones”, por parte el Sindicato de Choferes de Camiones (Sichoca), para que se despida a 505 trabajadores del Centro de Distribución ubicado en Moreno, se los indemnice y se los vuelva a contratar respetando la antigüedad. 

Lo hizo a través de una solicitada que se publicó en los principales medios del país, donde explicaron que el grupo argentino adquirió en noviembre de 2020 las acciones de Walmart en el país “con el firme propósito de invertir, desarrollar, crecer y asegurar los más de 10.000 puestos de trabajo a nivel nacional”. 

“Sin embargo –reclamó-, de forma casi inmediata, recibimos el pedido por parte del Sindicato de Choferes de Camiones de despedir al personal afectado a nuestro Centro de Distribución, indemnizarlo y volverlo a contratar con la misma antigüedad. Una práctica ilegítima, no prevista por ningún marco legal vigente, ni con la forma en que desarrollamos nuestra actividad en el país”.

Ante la negativa del Grupo perteneciente al empresario Francisco De Narváez, la firma denunció “recurrentes medidas de fuerza encubiertas” que, según informaron, derivaron en una caída del 75% en la distribución de alimentos básicos y en un desabastecimiento de productos esenciales a más de 1.000.000 de familias en todo el país.

Ante el agravamiento y la exposición que cobró el conflicto, el Ministerio de Trabajo de la Nación, intervino y dictó la conciliación obligatoria.

En aquel momento desde la empresa caracterizaron el planteo gremial como “una locura” y explicaron que “el pedido de despido que recae en una doble indemnización – por la situación de pandemia- va más allá de otras acciones que ha realizado el gremio”. El Decreto 39/2021 que prorrogó la prohibición de despido, en el marco de la pandemia por el Covid – 19, otorga a los empleados que sean despedidos “sin justa causa no cuestionados en su eficacia extintiva”, el derecho a percibir el doble de la indemnización correspondiente.

Luego de un cuarto intermedio de más de 15 días, con la conciliación obligatoria vencida, las partes se habían reunido, sin éxito, la semana pasada. Las negociaciones continuaron fuera del ámbito del Ministerio hasta que finalmente, ayer, arribaron al acuerdo.  |