Si bien desde hace años se menciona que hombres y mujeres tienen las mismas capacidades para desarrollar su carrera profesional dentro de las carreras STEM (de Ciencia, Tecnología, Ingeniería y Matemáticas, por sus siglas en inglés), lo cierto es que, en Latinoamérica en general (y en Argentina en particular), las personas de género masculino son mayoría. 

Esta disparidad tiene implicaciones en las organizaciones: al contar con grupos de trabajo donde claramente predominan los hombres, pierden nuevas perspectivas y miradas para encontrar soluciones a los problemas que deben resolver, una realidad inaceptable en la visión empresarial moderna.

Numerosas investigaciones han concluido que la diversidad es esencial para la productividad, la competitividad y la innovación de las compañías. Por este motivo, es fácil encontrar actualmente organizaciones que tienen el foco puesto en incorporar mujeres programadoras así como especialistas en data analytics y ciencia de datos, por dar solo tres ejemplos.

Por qué la mujer ha estado tan alejada de las carreras STEM

Son varios los factores que explican por qué las mujeres se han mantenido alejadas de las carreras STEM. Por un lado, hay estereotipos difíciles, como que los hombres tienen más facilidad para esas profesiones. Esto es falso porque el género no tiene nada que ver con la capacidad aprender estas disciplinas y ejercerlas con idoneidad.

Por otra parte, hay desconocimiento respecto a cómo es la práctica laboral. Muchos prejuzgan al pensar que se trata de carreras aburridas, para gente con excesiva orientación hacia lo técnico y que implican muy poca creatividad. 

Sin embargo, estas carreras ofrecen posiciones desafiantes, colaborativas y donde el foco suele estar en encontrar soluciones a problemas que tiene la sociedad. Incluso hay mujeres sumamente importantes tanto en la historia de la Tecnología en general como en la Programación en particular.

Los números respaldan el gran futuro que tienen las mujeres en las carreras STEM

Para poner lo dicho en números, cuando se analiza a quién se capacita en disciplinas STEM en Argentina, solo el 25% son mujeres. 

La buena noticia es que el panorama es alentador. Por ejemplo, en Digital House las alumnas representan el 40% del grupo estudiantil, representando un salto en los porcentajes.

Además, es habitual ver organizaciones que conceden beneficios para sus colaboradoras, como jornadas con horario flexible y mayor tiempo de licencia por maternidad. En este sentido, vale destacar que el 65% de las latinoamericanas que trabajan en tecnología ha visto que, en lo que respecta a la igualdad de género, la cancha de juego se ha nivelado en sus organizaciones durante los últimos dos años, según el estudio “Mujeres Latinoamericanas en Tech: situación actual y desafíos futuros”, llevado a cabo por la firma de seguridad Kaspersky.

Considerando que el 65% de los chicos que hoy están en el colegio primario trabajarán, según el World Economic Forum, de profesiones que hoy no existen, muchas de las cuales serán STEM, es importante seguir trabajando día a día para que más mujeres se inclinen por estas disciplinas. |