En las últimas dos semanas, la baja del valor de acciones de Mercado Libre alcanzó el 28% y activó algunas alarmas y miradas de recelo por parte de profesionales del caso, a la vez que cierta curiosidad por las razones que podrían haber desembocado en esta nebulosa financiera.
Lo cierto entre todas las posibles explicaciones, es que la plataforma de comercio electrónico más grande de América Latina perdió u$s 35.000 millones de capitalización de mercado en 2021: valía u$s 97.600 millones y ahora vale u$s 64.230 millones, registrando una pérdida de u$s 33.370 millones en menos de tres meses.
Para ver el panorama completo, de todas formas, hay que revisar lo particular del caso: Mercado Libre presentó un crecimiento anual del 533% en relación al 2020. Esto provocó una clara visión positiva, generando un aumento del 10% en sus acciones del mercado.
Pero lo inesperado ocurrió particularmente durante noviembre de 2021, momento en el que la compañía anunció la venta de 1 millón de acciones a un valor de u$s1.550 cada una, generando al día siguiente una caída del 5%. El objetivo era generar liquidez para implementar mejoras en la logística y otras cuestiones de los servicios que proveen. Lejos de lo estimado, el escenario de volatilidad que presenta el mercado norteamericano generó una presión de venta mayor a la pensada, provocando incertidumbres en sus inversores.
Las causas no son menores: recientemente, voceros de las Reservas Federales de Estados Unidos anunciaron que están dadas las condiciones para tomar medidas más agresivas contra la inflación histórica a la que se enfrentan. Esto presenta un escenario en el que las empresas con mayor liquidez en el mercado, es decir, que cuentan con grandes acumulaciones de efectivo, como lo es Apple, por ejemplo, presentan una situación de suba en un contexto general de baja.
Por si todo aquello no fuera poco, Mercado Libre forma parte de una vanguardia en materia de comercio electrónico, lo que es positivo, si no se deja de tener en cuenta a los constantes competidores que surgen en el rubro. Cabe destacar que también ha recibido un duro revés por una resolución emitida el pasado diciembre del 2021 por el Banco Central, en el que dictaminó que a partir del primer día hábil de 2022 se deberá "constituir un encaje del 100% de los fondos depositados por los proveedores de servicios de pago que ofrecen cuentas de pago (PSPOCP), conocidas como billeteras virtuales, para preservarlos de contingencias y garantizar que estén siempre a disposición de los y las ahorristas".
Habrá que esperar para ver cómo se desarrolla el futuro de la Compañía, que enfrenta un escenario político menos favorable al del gobierno de Cambiemos y JxC, debido a la batalla vigente con los bancos tradicionales que lo acusan de tener privilegios en el acceso a la información durante el tiempo de gestión de Mauricio Macri. Así, con sindicatos exigiendo adecuaciones para sus empleados y paros de transporte por reclamos laborales, el panorama luce desagradable para Marcos Galperín y sus inversores.|
