Garbarino: ¿Nuevo inversor o “ganar tiempo” para achicar la empresa? – Negocios & Política
 

Nueva audiencia el miércoles próximo |Garbarino: ¿Nuevo inversor o “ganar tiempo” para achicar la empresa?

El conflicto mantiene a 3.800 empleados en un limbo, con salarios y aguinaldos atrasados y sin cobertura médica en casos críticos. Fracasaron las negociaciones con el empresario Facundo Prado y ahora la firma de electrodomésticos anunció un acuerdo estratégico con un nuevo inversor
Ana Belén Ehuletche
Empresas
Ana Belén Ehuletche
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En una nueva audiencia en el Ministerio de Trabajo de la Nación, la empresa de electrodomésticos Garbarino informó sobre el interés de un posible nuevo inversor, y logró dilatar la resolución del conflicto una semana más.

El argumento alcanzó para que, ante dirigentes de la Federación Argentina de Empleados de Comercio (FAECYS), la cartera laboral vuelva a convocar para el miércoles próximo a una nueva audiencia, con el fin de encontrar una salida a una crisis que mantiene a 3.800 empleados en vilo.

"Garbarino cerró con un grupo inversor que trabaja con empresas en crisis. Si bien esto no asegura el inmediato pago de deuda salarial, entienden que para la semana próxima tendrían alguna novedad, por lo que pasamos al próximo miércoles", dijo una fuente de la cartera laboral a NA.

Respecto al anuncio que realizó la vicepresidenta de Garbarino, Mariana Casares, sobre la apertura de negociaciones con un nuevo grupo interesado, Javier Valenzuela, abogado del Sindicato de Empleados y Obreros de Comercio y Afines Zona Oeste (SEOCA) indicó que “lo que hay son más rumores, nada que tenga algún viso de certidumbre”.

El apoderado gremial confirmó que “se habla de un nuevo socio, un grupo inversor que se estaría por constituir un fideicomiso” pero se centró en la problemática laboral. “Se continúan adeudando salarios y no hay nada que suponga expectativas nuevas”, afirmó.

Conflicto agravado

Por su parte los trabajadores denuncian que el dueño de la cadena de electrodomésticos “boicoteó” la venta al empresario Facundo Prado.

Aunque en mayo, el nuevo titular del Garbarino, Carlos Rosales – que adquirió la marca en diciembre de 2020- aceptó negociar la venta de la marca con el empresario Facundo Prado, propietario de la firma Supercanal Arlink, una operadora de televisión por cable e Internet que cuenta con 750.000 abonados, en 14 provincias, en las últimas semanas el acuerdo se trabó.

La oferta que realizó Prado, luego de un período de auditoria, por la transferencia de la mayor cadena de electrodomésticos y electrónica del país, que pone en riesgo la continuidad laboral de cerca de 4.300 trabajadores, fue rechazada por Rosales.

La empresa adeuda parte de los sueldos de abril, mayo, junio y los aguinaldos correspondientes. “Rosales tomó la decisión de cerrar todos los locales, luego abrió algunos y otros están tomados por los trabajadores”, contó Érica Salazar, delegada gremial de las sucursales de zona Oeste.

La negociación con Prado, el empresario ligado a las telecomunicaciones se cayó, según pudo saber N&P, porque “el mismo dueño la boicoteó”. En ese sentido Salazar denunció que “Rosales hace las situaciones cada vez más difíciles, obviamente con la intención de seguir reestructurando la empresa, lograr de alguna manera el cierre de varios locales, deshacerse de trabajadores, achicar el negocio para ir por una plataforma online, que fue su intención desde el primer momento”, dijo Salazar.

Además de la crisis en las sucursales que en su mayoría ya fueron cerradas, en Tierra del Fuego, casi 300 operarios mantienen tomadas desde hace más de dos meses las plantas de Tecnosur y Digital Fueguina en Río Grande -proveedores de Garbarino-, a la espera de una respuesta de la compañía en crisis.

La situación se volvió crítica en Río Grande donde las plantas no cuentan con servicios ni energía, por eso, el gobernador Gustavo Melella inició gestiones para destrabar el conflicto. “Garbarino nos avisó que las plantas no tienen luz, ni gas y los trabajadores, ni Obra Social, ni ART y que ellos no lo pueden pagar. La ausencia de la empresa es bastante grande, dicen que no tienen dinero, ni fondos, que les ha ido mal, que no pudieron acceder a líneas de créditos”, señaló.

Una de las puertas de emergencia para resolver la problemática en las fábricas del sur puede llegar de la mano del grupo Newsan, una poderosa empresa argentina dedicada a la fabricación, comercialización y distribución de electrónica de consumo y artículos para el hogar, que podría empelar a los trabajadores que perdieron sus puestos en medio de la crisis que atraviesa Garbarino.|

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