En el gobierno del Frente de Todos se descarta de plano una nueva ley de medios como terreno de lucha contra la influencia del multimedio Clarín. Sin embargo, con la ley de defensa de la competencia en la mano, Alberto Fernándezimpulsa el crecimiento de otros grupos, capaces de disputarle territorio a Héctor Magnetto.

Algo de todo eso se gestó en la última visita bilateral de Estado en México, donde el presidente se reunió con Carlos Slim, el magnate azteca dueño del grupo Claro: “Tenemos confianza en la Argentina y el interés de seguir invirtiendo, como lo hemos hecho ya casi 20 años, en las telecomunicaciones, que es nuestro negocio”, sostuvo el empresario tras el encuentro de fines de febrero.

En esa misma reunión, Fernández y Slim acordaron que el grupo Claro ampliaría sus operaciones en la Argentina para ofrecer el servicio de triple play, lo cual fue confirmado ayer por el mandatario peronista: “Hablamos con Slim la posibilidad de que Claro se expanda más”, anunció Alberto en una entrevista con el canal C5N.

El presidente develó así sus intenciones de limitar la influencia del gran diario argentino en el Poder Judicial y en el sistema político: “Quiero que el sistema de cables se abra, que el sistema de transmisión de imágenes se amplíe, terminemos con los privilegios que durante los últimos cuatro años le dieron (a Clarín) que desalentaron a empresas como Telefónica y Claro”, lanzó y arremetió: “Cuanto más competencia tengamos, mejor va a ser y las arbitrariedades y las patoteadas van a ir cediendo”.

En su alocución, Fernández dejó de lado su tono conciliador y fustigó con dureza al grupo de Magnetto: “Uno de los que menos quiere que la Justicia cambie es Clarín por la forma en que incide sobre los jueces. Incide con lobbys e incide con tapas”, señaló.

Consultado sobre la negativa de la empresa —una de las más grandes de la Argentina— a ajustarse a las regulaciones en el precio de los servicios de telecomunicaciones, el mandatario indicó que “Clarín desafía a la Argentina todos los días” y que “ellos imponen su poder a garrotazo limpio”.

En el marco de esa lucha, Fernández y Slim acordaron que Claro haga las inversiones necesarias para ofrecer el triple play —telefonía, internet y TV—, acuerdo que podría traer consecuencias políticas sin precedentes. En este sentido, el presidente dijo más de una vez que el “problema Clarín” no se resuelve con una nueva ley de servicios audiovisuales, sino con la lay de defensa de la competencia, aunque hasta ahora no había aparecido una empresa capaz de correr al multimedio.  |