Los fabricantes de electrodomésticos, autos, motos, muebles e insumos para la construcción ya negocian con el Gobierno en el acuerdo de precios y salarios subas de hasta el 34%, mientras que indumentaria, textil y calzado dicen que no pueden pagar esos incrementos salariales. Turismo, gastronomía, entretenimiento, cultura, son los cuatro sectores de la economía que el gobierno estudia subsidiar hasta fin de año.
Hoy a las 11, cuando se reúnan los referentes de la industria alimenticia, construcción y electrónica para intentar avanzar en un acuerdo global de precios y salarios, el Gobierno les pedirá que suban los sueldos al menos un 34%. “Primero citan a los que les va bien”, dicen desde algunas compañías.
Los sectores plantearán distintos problemas al equipo económico. Entre ellos, la aceleración de la inflación, que en diciembre y enero fue de 4 por ciento, será otro de los temas en la agenda de la discusión.
El Gobierno y en particular el ministro de Economía, Martín Guzmán, apuesta a alinear expectativas con el sector privado y reducir las proyecciones del Índice de Precios al Consumidor, que llegan al 50 por ciento por parte de algunas consultoras sondeadas por el Banco Central.
"Si todos piensan que la inflación va a estar en torno a 45, 50 por ciento, efectivamente los formadores de precios empiezan a anticiparse y eso termina convalidando la inflación alta", analizó El ministro de Desarrollo Productivo, Matías Kulfas, en la reunión del pasado 11 de febrero.
La construcción
El sector de la construcción se perfila el gran motor de la recuperación. Si bien la demanda de insumos del sector concluyó 2020 con una caída de casi 20%, durante los últimos meses ha mostrado una clara recuperación en “V” que le permitió superar con creces los niveles pre-pandemia.
Justamente por ese impulso, desde el Gobierno avanzan en arrancar marzo con el Pro.Cre.Ar. Las estimaciones oficiales creen que la obra pública traccionará una inversión del sector de más del 50% en términos reales en 2021.
Una ley que será aprobada en marzo en el Congreso para promover las inversiones en el sector mediante incentivos fiscales y blanqueo de capitales. Algo que será central, aseguran los desarrolladores.
En la construcción tienen claro cuáles son sus problemas: la demora en las aprobaciones de proyectos de obra, producto de las limitaciones que impone la pandemia y la cuarentena, el golpeado nivel del salario real y el complicado acceso al crédito hipotecario.
Las alimenticias y las automotrices
Otro sector ganador de la pandemia que se reunirá a "cara de perro" con el Gobierno será el de las alimenticias, luego de días de tensiones por la imputación a grandes empresas por "retención en sus volúmenes de producción o falta de entrega de determinados productos de consumo masivo para su comercialización".
En tanto, aun no se sabe cuando se reunirán con el otro sector ganador del trimestre: la industria automotriz. Con ellos, dicen en el Gobierno, quieren hablar sobre la recuperación de la demanda doméstica en un contexto de restricciones a las compras externas y de dólares oficiales y el mayor dinamismo del mercado brasilero para aumentar las exportaciones.
Otro problema que los aqueja: el cierre de más de 20 concesionarios de Ford, luego que la terminal se fuera de Brasil y prometiera que no cerraría negocios en la Argentina. Algo que, por el momento, parece no estar cumpliendo. |