Se vienen 15 días maratónicos para los diputados. El Congreso mostrará su rostro más activo desde que comenzó la pandemia. Ayer se levantaron las pantallas en donde los diputados se mostraron durmiendo, bebiendo o tanteando los resultados de alguna cirugía y se colocó una hilera más de bancas para que la oposición pueda mostrar a sus espadas más importantes argumentando en lo que promete ser un acalorado y extenso encuentro.
La semana que viene la cámara de Diputados va a tratar la ley de presupuesto junto a la del aporte solidario por única vez y todos lo saben y están presente en el intenso "toma y daca" que se vive por estos días. "Para poder aumentar lo que se gasta hay que aumentar lo que se recauda", señala Carlos Heller y recuerda que Alberto Fernández tiene previsto enviar una reforma tributaria. Pero todos tienen más presente el proyecto del impuesto a la riqueza con el que el Ejecutivo busca recaudar 300.000 millones de pesos.
En ese toma y daca el bloque de Juntos por el Cambio reclamó que se coparticipe el impuesto PAIS, el impuesto de 30% que se cobra por la compra de divisas extranjeras a los ahorristas, más fondos para el transporte y lo que generó la sonrisa socarrona de más de un diputado provincial: la vuelta del fondo sojero.
Creado en 2009 para descomprimir la pelea con el campo y que los gobernadores se hagan cargo de bajar los reclamos de los piquetes de la abundancia, estaba compuesto por el 30% de lo recaudado por retenciones de las exportaciones de granos de soja y el 27% de harinas y aceites de soja.
En 2018, el presidente Mauricio Macri decidió eliminarlo y las provincias perdieron 35.000 millones de pesos en medio de un proceso de recesión. Algunos se acuerdan porque eran Ejecutivo en sus distritos, otros porque acompañaron a sus gobernadores a presentar demandas en la Corte Suprema que todavía hoy están. Pero todos se acordaron que fue lo que en ese momento se llamaba Cambiemos quien decidió eliminarlo.
Los pedidos de más fondos son incesantes, pero el oficialismo tiene algunas directivas que bajaron de la Casa Rosada y del Ministerio de Economía. La primera es que la intención del Ejecutivo es mostrar la mayor cantidad de apoyo al Presupuesto, en especial, para que el Fondo Monetario Internacional, reduzca las críticas sobre el proyecto de ley. La segunda es que nada es gratis, si quieren más que apoyen más.
"La ecuación es simple, no hay plata. Ellos -por JxC- todo el tiempo nos decían que digamos de dónde sacamos los fondos. Hoy que son ellos los que piden plata somos nosotros los que les decimos de dónde van a salir los fondos, y van a salir del Aporte Solidario por Única Vez por lo que deberían dejar de decirle impuesto y levantar la mano para apoyarlo", explicó en un tono que iba entre la satisfacción de tener un argumento sólido y el enojo de no tener los votos asegurados.
Como el oficialismo no cuenta con los votos para aprobar la medida, cedió más fondos para uno de los reclamos de los diputados del pan peronismo: subsidios al transporte. Así que con el fin de garantizar votos provinciales, el ministro Martín Guzmán dio luz verde para que se modificará la partida de subsidio al transporte del interior. De 13.500 millones de pesos que tenía inicialmente se incrementará 20.500 millones de pesos.
Para el AMBA de Horacio Rodríguez Larreta, la partida continúa en 65.000 millones de pesos. "Si tienen que aumentar el valor del boleto de colectivo, que lo hagan, cuando estaba Macri los aumentos los comunicaba Guillermo Dietrich que era el ministro de Nación. Ahora no hay más opción, que alguna vez salgan y pongan la cara para comunicar una mala noticia", señaló un legislador del Frente de Todos.