El peligro de quiebra pasó. Así lo señalan desde la Asociación de Isapres, el sistema de salud privado chileno.

En diciembre del 2022, la Corte Suprema les ordenó no subir sus planes y restituir los cobros en exceso, luego de que un grupo de usuarios presentara acciones judiciales por el aumento en la llamada “tabla de factores” que determina cuánto se cobra según el sexo del cotizante, si es soltero o casado o si tiene hijos.

Las Isapres ya estaban en una situación compleja luego de la entrada en vigencia de la Ley 21.350 que regula la forma en que suben sus planes. Esto provocó que muchas de las aseguradoras acortaran costos y se vieran en aprietos económicos debido a que no podían subir más los planes de salud para compensar las pérdidas.

Incluso, algunas empresas que pertenecen a conglomerados internacionales, activaron una cláusula del Tratado de Libre Comercio entre Chile y Estados Unidos para evitar el quiebre del sistema.

Sin embargo, según el presidente de la Asociación de Isapres, Gonzalo Simón, la crisis ya se habría superado. “Trabajando con el Ministerio de Salud se lograron ciertas modificaciones, se puso en práctica una nueva ley (la 21.350) y finalmente esto permitió que existiera una mayor certeza jurídica en el funcionamiento”.

Simón agregó que “el proceso de regularización ya comenzó, la parte más compleja fue a fines del año pasado”.

La Superintendencia de Salud es la encargada de crear un mecanismo nuevo para establecer una tabla de factores, por lo que abrió una mesa de trabajo con el sistema privado de salud, aunque las empresas se retiraron a la segunda reunión.

“Hemos estado siempre de acuerdo con que haya reformas y modificaciones legales, pero nosotros más que eso no podemos llegar, no somos partícipes de la legislación. Los legisladores son el Ejecutivo y el Congreso y las Isapres lo que tienen que hacer es acatar”, aseguró Gonzalo Simón.

Recursos del Estado

El riesgo de quiebra de estas empresas podría significar que por lo menos 3 millones de personas se quedarían sin un sistema de salud.

En Chile, el sistema público de salud (Fonasa) cubre a la mayoría de la población, sin embargo, existen numerosas listas de espera para atención y la llegada de esa cantidad de cotizantes podría hacer colapsar al sistema.

En este contexto, se insinuó que el Estado podría ir en apoyo de las aseguradoras en caso de quiebra para evitar sobrecargar a Fonasa. Sin embargo, la ministra de Salud, Ximena Aguilera, negó esta posibilidad.

“El traspaso de recursos del Estado a las aseguradoras está descartado. Aquó hay un tema de responsabilidad de las Isapres, porque evidentemente, en la judicialización de este tema, consistentemente la Corte les ha dado la razón a los afiliados”, dijo la ministra.

“Las Isapres no han pedido ningún salvataje ni apoyo económico del Estado. Tampoco están esperando un perdonazo”, indicó Gonzalo Simón. “Lo que se está pidiendo para superar la crisis no es otra cosa que cumplir con los principios que regula el sector, que señalan que prestaciones y beneficios de salud se financian con las cotizaciones”.

Por lo pronto, el Ministerio de Salud está trabajando en una agenda legislativa que fortalezca el sistema público y otros proyectos que protejan a los cotizantes privados, en el caso de que nuevamente aparezca un riesgo económico para las Isapres que les impida entregar un servicio de calidad a sus usuarios.