La serie de humor con Susana Giménez es un hit en la plataforma de Amazon – Negocios & Política
 

Ocio & Estilo |La serie de humor con Susana Giménez es un hit en la plataforma de Amazon

“Porno y helado” parece ser un combo atractivo y novedoso. Un director de la nueva generación que juega en todos los ángulos del escenario, un youtuber, una influencer y una diva de la TV de sobrados pergaminos en la pantalla, son los ingredientes de una producción inteligente que promete aire fresco.
Juan Báez Nudelman
Cine y Series
Juan Báez Nudelman
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Una nueva generación de humor se hizo visible a través de esta gran producción escrita, dirigida y protagonizada por Martín Piroyansky que tiene por nombre Porno y helado. El actor reconocido por su anterior film llamado Voley ahora apostó a la unión de generaciones entre youtubers, como Nacho Saralegui, y la mítica diva de la televisión argentina, Susana Giménez, que vuelve a la ficción tras un largo período de ausencia en el rubro.

A no confundirse con lo curioso del título con el que se presenta esta producción: Porno y helado llega como una pieza consagratoria en la carrera como realizador de Piroyansky y hay mucho de donde agarrar para justificar esto. En primer lugar, la gestación de un universo humorístico muy delirante, con personajes grotescos y bien delimitados que sin embargo logran llegar a lugares muy profundos.

El delirio de la sorpresa coherente

Pero antes de indagar en los detalles creativos, repasemos la información técnica. Porno y helado es una producción de Amazon Prime Video, que consta de 8 capítulos. Está escrita, dirigida, y protagonizada por Piroyansky junto a Saralegui, conocido por su canal de Youtube donde realiza sketchs humorísticos; y también con la gran actuación de Sofía Morandi, la actriz e influencer de Neuquén que viene con una carrera en alza.

Además, fue la productora internacional la que propuso al creador de la serie que esté incluida en el casting la mismísima Susana Giménez, lo que Piroyansky aceptó sin dudar por lo interesante que podría ser el trabajo con la conductora de TV por lo que significa para la cultura argentina. En una entrevista incluso declaró que “la presencia de Susana Giménez aporta mucho a lo absurdo del humor que maneja la serie”.

Al respecto, aclaró que “nunca había pensado el papel que interpreta para ella, pero lo sugirió Amazon, ellos venían en conversaciones con Susana para hacer algo en alguna de las producciones y en una reunión que tuvimos me contaron que había leído el guion y que quería hacer el personaje”. Incluso contó que luego de algunas videollamadas tuvo la oportunidad de visitarla en su casa de Punta Del Este, y hasta deslizó que al llegar, la diva le dio a elegir entre agua, café o whisky cuando lo recibió y que eligió la última opción, entre risas.

Volviendo a los detalles creativos, no es una sorpresa que a Susana le haya interesado formar parte de esta serie. La propuesta se enfoca en la amistad de Pablo y Ramón, dos treintañeros que nunca superaron algunas etapas de su adolescencia, y que ante la búsqueda de pertenecer, arman una banda falsa que se termina volviendo real. Esto, gracias a la ayuda de su manager, Cecilia, una chica con problemas de dinero que se dedica a estafar de distintas maneras a los ingenuos que se cruza en el camino.

Así es que sus intereses se unen, llevándolos a experimentar un montón de situaciones nuevas para sus vidas tan rutinarias hasta el momento. Las líneas de humor constante se mezclan entre guiños a la moda, las tendencias artísticas y su esnobismo, las dificultades para relacionarse cuando no se encaja del todo en las lógicas, que además, como lo muestra de manera muy exagerada la serie, cambian de un minuto a otro. A esto, le acompaña una estética sumamente cuidada, con una paleta de colores muy bien establecida que recuerdan a lo mejor de Wes Anderson y sus cuadros perfectos.

Así, una vez presentado el mundo, los elementos interactúan de una forma verosímil, logrando que el espectador esté dispuesto a esperar cualquier cosa de la trama. Y el factor delirante la convierte también en una joya diferente a lo que nos tiene acostumbrado el estilo argentino del cine. Se podría trazar un paralelismo con el grotesco criollo de Esperando la Carroza, donde el registro de actuación es exacerbado pero coherente.

Respecto de la repercusión que tuvo la serie en el público, Martín Piroyansky aseguró que “es impresionante” y agregó: “no puedo creer lo que está pasando. No me lo esperaba porque tiene un tono muy delirante y es tan absurda la serie que a veces, ese tipo de cosas no sé cómo se las puede llegar a tomar el público”.

Sobre el acabado final de la obra, dijo que “prefiere separarlo del impacto, que es otra cuestión. La serie como resultado me gustó mucho, no sé si hay algo hecho de esta forma en Argentina como para compararlo, pero tengo hasta mi capítulo preferido que es el número 5”. |

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