El 49,3% de los hogares de la Ciudad de Buenos Aires y el conurbano bonaerense sufrió una reducción de sus ingresos durante los meses que duró el aislamiento por el coronavirus. El número surge del estudio sobre el impacto del Covid-19 realizado por el Instituto Nacional de Estadística y Censos (INDEC).
Además, más del 40,3% de los hogares del AMBA registró problemas de empleo de al menos alguno de sus integrantes. Si se considera las casas donde hay niños, los problemas laborales alcanzaron el 48,3%. Considerando los sectores de menos recursos, la reducción de ingresos superó el 57%.
Además, alrededor del 30,4% de las personas con empleo logró continuar con tareas laborales desde su vivienda.
Desde el instituto que conduce Marco Lavagna, también relevaron que el 26,8% de los hogares tenía algún miembro que, además de recibir alguna prestación del sistema de protección social vigente, accedió a alguna de las prestaciones específicas correspondientes a las políticas implementadas a raíz de la pandemia, como el IFE o el ATP.
Un 21,2% de las viviendas que no estaban alcanzadas por prestaciones sociales previas a la pandemia tuvo acceso a alguno de los beneficios derivado de las nuevas medidas.
Alimentos, medicamentos y servicios
Otro de los datos desalentadores que mostró el INDEC es que en un tercio de los hogares se redujo la compra de alimentos debido a la crisis. Mientras que en CABA el porcentaje de quienes bajaron el consumo es del 21,2%, el el conurbano la cifra asciende al 38%.
Por otro lado, en el 46% de las viviendas bajó el consumo de productos no alimentarios durante la cuarentena.
Respecto del pago de servicios y alquileres. Casi tres de cada 10 hogares admitieron que dejaron de pagar o que tuvieron problemas para cubrir los costos de los servicios de la vivienda. La situación afectó al 14,7% en la capital del país, mientras que el impacto resultó superior en el conurbano bonaerense, con el 33,3%.
A pesar de la dramática situación, solo en el 4,6% de las viviendas algún integrante manifestó dificultades para acceder a medicamentos. y el 8,6% tuvo inconvenientes para realizar una consulta médica.