Tras su gira por Europa, el presidente Alberto Fernández participará en la cumbre del G7 que se realizará el próximo 27 de junio en el castillo Schloss Elmau, en Bavaria, un encuentro al que también asistirán delegaciones de otras naciones emergentes como India, Indonesia, Sudáfrica y Senegal, en las cuales está vigente la democracia como sistema de gobierno.
Desde la Cancillería argentina confirmaron la respuesta positiva a una invitación cursada por el canciller de ese país, Olaf Scholz, a cargo de la presidencia del llamado Grupo de los Siete (G7), que reúne a las principales potencias económicas occidentales -Alemania, Francia, Italia, Gran Bretaña, Canadá y Estados Unidos- más Japón.
Alemania preside el G7 desde principios de 2022, con el lema “Progreso hacia un mundo equitativo”, y tiene como objetivo de que bajo su presidencia se logre enviar una “señal fuerte en apoyo de la responsabilidad internacional y desarrollar respuestas específicas a los desafíos globales”, explicaron fuentes oficiales.
Scholz, el líder socialdemócrata que sucedió este año a Angela Merkel, recibirá a los jefes de Estado y de Gobierno del G7 entre el 26 y el 28 de junio próximo en los imponentes Alpes bávaros, en una reunión que tuvo que modificar su agenda por la irrupción del conflicto bélico entre Rusia y Ucrania.
Originalmente, esta agenda estaba enfocada en temas como el cambio climático, la lucha contra la pandemia y el fortalecimiento de la cooperación internacional y las democracias en todo el mundo. Sin embargo, ahora, la persistencia de la guerra que preocupa al mundo se volverá eje del encuentro ya que todos los países del G7 apoyan a Ucrania y condenan la agresión del gobierno de Vladimir Putin.
La invitación para que Fernández se sume a este encuentro internacional puede leerse como el primer efecto concreto de la gira que realizó el mandatario argentino por Europa donde visitó la capital alemana el pasado 11 de mayo, junto a España y Francia.
En ese sentido, desde la Cancillería que encabeza Santiago Cafiero indicaron que tras el encuentro que Fernández y Scholz mantuvieron en Berlín, el funcionario alemán calificó a la Argentina como “país socio del G7 durante la Presidencia de Alemania” para poder discutir “con jefes de estado y de gobierno seleccionados y líderes de organizaciones internacionales qué pasos específicos podemos tomar para fortalecer la cooperación multilateral”.
Además, destacaron que, en las reuniones que Fernández mantuvo en Europa -con Scholz en Berlín; con Pedro Sánchez y el rey Felipe VI en Madrid; y con Emmanuel Macron en París-, el Presidente pidió “encontrar una respuesta y un camino de salida urgente” a la guerra en Ucrania y ofreció las oportunidades argentinas para proveer alimentos y energía a una zona que espera una profunda crisis en esas áreas si la guerra persiste.
En sus encuentros con los líderes europeos, Fernández coincidió en que las consecuencias de la guerra impactan en una suba de los precios internacionales de los alimentos y la energía que repercuten en todo el mundo, y escuchó de primera mano la preocupación que aqueja a los países europeos por las trágicas consecuencias humanas y económicas que está generando y ponen en riesgo a las zonas más vulnerables del planeta, como África.
“Es bueno saber que la Argentina es un socio fiable para Alemania. Ambos coincidimos en condenar la invasión de Rusia a Ucrania. Saludo la decisión del Presidente de ponerse del lado de las víctimas. Coincidimos en condenar esta brutal agresión de Rusia”, dijo el Canciller germano en una declaración conjunta a la prensa luego del encuentro con el Presidente argentino en Berlín.
En su gira, como presidente pro témpore de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (Celac), Fernández propuso celebrar una cumbre entre ese bloque regional y la Unión Europea, que preside de forma pro témpore el francés Macron hasta el próximo 1 de junio.
Participación de los emergentes
En el encuentro del G7 al que también asistirán delegaciones de otras naciones emergentes como India, Indonesia, Sudáfrica y Senegal, en las cuales está vigente la democracia como sistema de gobierno, se destacará la presencia del presidente argentino, como el único mandatario de la región latinoamericana.
Actualmente, Indonesia tiene la Presidencia del G20 e India tiene una asociación estrecha con Alemania que se reflejó en una reciente visita que el primer ministro Narendra Damodardas Modi realizó a Berlin. En tanto Senegal preside la Unión Africana; Sudáfrica integra el G20 y Argentina ejerce la presidencia pro tempore de la Celac.
La semana pasada, en el marco del respaldo al país ante la invasión de Rusia, Alemania aprobó un paquete de ayuda por 19.800 millones de dólares para Ucrania para “cubrir el déficit financiero y asegurar el suministro de servicios básicos al pueblo”.
Los fondos serán utilizados “para ayudar a Ucrania a cubrir su déficit financiero y continuar asegurando el suministro de los servicios básicos al pueblo ucraniano”, afirmó un comunicado publicado tras la reunión de ministros de Finanzas de las naciones más industrializadas del mundo.
Por otro lado, aún resta definir si, antes de su nuevo viaje a Alemania -a fines de junio-, Alberto Fernández asistirá a la IX Cumbre de las Américas, que se desarrollará del 6 al 10 de junio en Los Ángeles, Estados Unidos. Recientemente y en sintonía con el planteo de México entre otros países de la región, la Argentina endureció su posición frente a la insistencia de Estados Unidos de excluir a Cuba, Venezuela y Nicaragua de la cumbre.
“El Presidente considera, al igual que su par mexicano (Andrés Manuel López Obrador) y otros presidentes de Latinoamérica, que la Cumbre tiene que ser con todos los países miembros de América”, dijo el viernes pasado la portavoz de la Presidencia, Gabriela Cerruti, y aclaró que la decisión del jefe de Estado de asistir o no al encuentro dependerá de si Estados Unidos invita a todos los países de la región, una posibilidad que por el momento rechazada por la Casa Blanca.
