La fecha clave del domingo se acerca y, ante ello, los candidatos que pelearán por llegar a la Cámara de Diputados de la Nación en representación de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires realizaron sus cierres de campaña con distintas modalidades, en los que dieron su última demostración de fuerza de cara a la jornada democrática.

Se renovará la mitad de la cámara baja y de un tercio del Senado, marco en el que Juntos por el Cambio busca arrebatarle la mayoría al oficialismo del Frente de Todos.

Pero en esa lucha no están solos y otros jugadores, como el Frente de Izquierda y el Partido Libertario, restan votos por derecha y por izquierda a los dos principales partidos políticos del país y representantes de la grieta ideológica que protagoniza la vida política argentina.

Vidal pide un freno

Juntos por el Cambio eligió el parque Naciones Unidas del barrio porteño de la Recoleta para el cierre. Allí, la primera candidata por la ciudad, María Eugenia Vidal, habló frente a una multitud y pidió "frenar al kirchnerismo".

La ex gobernadora de la provincia de Buenos Aires, que para estas legislativas volvió al distrito que la vio nacer políticamente, agradeció a su padrino Horacio Rodríguez Larreta, al ex presidente Mauricio Macri y a la ex ministra de Seguridad Patricia Bullrich, quienes la escuchaban atentos.

“Sé que no es fácil lo que se viene, pero en las últimas semanas recibí de ustedes una energía que me conmovió y me conmueve, una fuerza poderosa que dice que no hay disposición a seguir así ni a someterse y que el domingo se va a convertir en millones de votos en las urnas”, dijo Vidal.

En ese sentido, atacó al peronismo, al reiterar que “sé que no va a ser fácil”, debido a que “ya conocemos al kirchnerismo”, indicó la candidata y agregó: “En estos dos años gobernaron solo para ellos y no hicieron nada de lo que dijeron que venían a hacer. Ni en una de las peores crisis sanitarias de nuestra historia pudieron ponerse del lado de la gente".

Además, la postulante apuntó a la conformación de la cámara desde el 10 de diciembre, cuando se produzca el recambio: “Necesitamos ser un bloque de 120 diputados, un bloque que represente a esa mayoría de argentinos y que frene los atropellos del kirchnerismo. Que te cuide de ese avasallamiento y empiece a construir otro camino".

Según Vidal, tras la derrota del oficialismo el pasado 12 de septiembre en las Paso, “millones de argentinos les dijeron basta y no escucharon. Nos respondieron con peleas entre ellos, el plan platita y siguieron con el 'ah, pero Macri'. Siguieron peores que antes".

Por ello, le dijo a los porteños que "ir a votar este domingo es limitar el daño, es poner un freno. Es decir basta. Y, sobre todo, ir a votar este domingo es gritar que no pudieron con nosotros, que no nos rendimos, que sabemos que podemos tener un futuro distinto", concluyó.

La maratón de Santoro

La modalidad elegida por la cabeza de lista del Frente de Todos, el legislador porteño Leandro Santoro, estuvo lejos de los clásicos actos peronistas.

Por el contrario, el alfonsinista decidió cerrar su campaña con una recorrida maratónica por las quince comunas de la ciudad de Buenos Aires. Emulando el “timbreo” macrista, Santoro optó por finalizar la etapa proselitista “con el puerta a puerta más grande de todos”, como lo calificó el propio candidato.

“Barrio a barrio y voto a voto, decimos sí en la Ciudad. sÍ al trabajo, a la educación, a la salud, al futuro", dice el flyer que publicó en las redes sociales el FdT porteño, a falta de un acto central del gobierno nacional que nucleara a todos los referentes del espacio que buscan una banca.

El recorrido del radical culminó en la comuna 4, donde expresó que “la misión no es venir a buscar a los convencidos. Hay que ir a buscar a los que no nos votaron o dudan en votarnos”, sostuvo antes de posar para las selfies con los vecinos.

Si bien no dio un discurso de clausura, en declaraciones posteriores al canal C5N, el frentetodista pidió a los votantes “que tengamos memoria, recordemos lo que fue”, adujo en relación al gobierno de Mauricio Macri.

En esa dirección, agregó que “ya te están diciendo lo que quieren hacer, tengamos claro que la única alternativa de frenar a esta derecha es apostando a un Frente de Todos potente, poderoso y participativo”, lanzó, como una reminiscencia al pedido de “freno al kirchnerismo” por parte de su contrincante María Eugenia Vidal.

“Seguro vamos a tener que modificar cosas, no nos salió todo bien, a pesar de la pandemia seguramente cometimos errores”, planteó sobre la primera mitad de la gestión de Alberto Fernández, y añadió: “Pero el contrato electoral, los valores, las ideas de este espacio político son verdaderamente indelebles, nuestras ideas son invencibles, necesitamos que todos los compañeros el próximo domingo se acerquen a las urnas”.

Pero además, el amigo del presidente advirtió a los votantes por el avance de las fuerzas conservadoras, ya que, durante la campaña, “pudimos ver a una derecha mucho más cruda, que además ya anunció que piensa construir un acuerdo común con (Javier) Milei y con (José Luis) Espert”.

Milei y el desencanto con “la casta”

Si hay un candidato a nivel nacional que pudo instalar un ritmo y un eslogan efectivo, acompañado de un discurso que para nada buscó esconder sus postulados antiEstado y anticasta política, ese es Javier Milei.

Siguiendo la lógica de sus actos desde su lanzamiento a la política, el economista del Partido Libertario cerró al ritmo de Panic Show, la canción de La Renga, con la que amenaza con “comerse” a quien, entiende, es el principal es el principal enemigo del pueblo: la casta política.

En el Parque Lezama de la capital, el ex panelista de TV arengó a los 15.000 militantes presentes y fustigó contra los modelos que históricamente gobernaron la Argentina, quienes la llevaron "a una decadencia estructural inescrupulosa, la cual se ve en esta coyuntura peligrosa en la que vive la sociedad: la del fifty-fifty, la del 50 por ciento de pobres y de inflación".

Sin embargo, a lo largo de las jornadas de proselitismo, y en distintos medios de comunicación, Milei fue agrandando el círculo de quienes, para él, eran parte de la casta política. Sacó de ahí a Macri y a Bullrich, además de ponderar la gestión menemista de Cavallo, en un intento por restar votos por derecha a la principal fuerza opositora al kirchnerismo.

Planteó que, desde su banca en Diputados, la cual tiene casi asegurada, buscará "liberar al pueblo argentino de tanta opresión estatal". También consideró que quieren terminar "con el verso ese de que ‘dónde nace una necesidad nace un derecho'", en referencia al clásico postulado justicialista. Según su visión, eso genera suba del gasto público, de impuestos, de deuda y de emisión, por lo que "estamos peor que en las vísperas del Rodrigazo".

No solo se refirió a cuestiones económicas, sino que se refirió a la "superioridad de los valores liberales", y planteó que están a favor "de la vida, la libertad y la prosperidad".

Respecto de la grieta, el economista pidió a los votantes que "no se dejen llevar por el canto de las sirenas. Si quieren liberalismo no voten la copia trucha, voten a La Libertad Avanza”, dijo en referencia a JxC, espacio que asimiló con el oficialismo: “Vamos a dejar en evidencia en el Congreso que ellos son todo lo mismo".

Bregman, contra la resignación

La izquierdista Myriam Bregman es la otra candidata que buscará los votos de los “desencantados” que se caen de la grieta, lo que quedó reflejado en sus ataques a la figura de Javier Milei en el debate televisivo, donde lo acusó de ser “empleado de las corporaciones y defensor de los dictadores”.

Bregman cerró su campaña en Congreso el miércoles último, acompañada de los principales dirigentes del Frente de Izquierda Unidad (FIT-U), acto que contó con la participación de la militancia de todos los partidos que componen el espacio: el 80 % de la izquierda a nivel nacional.

“Conquistamos algo que nadie anunciaba: ser la tercera fuerza nacional”, aseguró la dirigente del PTS y explicó: “Ahora tenemos el desafío de repetir eso en las generales”.

La dirigente remarcó la gran campaña del FIT-U y, particularmente, la de Alejandro Vilca en Jujuy, trabajador coya recolector de residuos que quedó a pocos votos de ingresar al Congreso en las Paso: “Se enfrentó a ese régimen re podrido de (Gerardo) Morales que el peronismo avala y proscribe con él”, aseguró.

En su lucha cuerpo a cuerpo con Milei por un lugar en el Congreso, la candidata indicó que “también apostamos a ser tercera fuerza en la Ciudad de Buenos Aires", aunque no ahorrró palabras para criticar la administración de Alberto Fernández.

“Mientras nosotros hacíamos una campaña con fuerza, otros, teniendo la fuerza del Estado recorrieron canales, radios, propagando la filosofía de la resignación”, atacó Bregman, y siguió: “Diciendo ‘no se puede’, ‘solo te queda bajar la cabeza’, ‘cuidado que viene la derecha’, mientras ellos ponían en el gobierno a Manzur, al vergonzoso Domínguez que fue a Glasgow a decir que no contamina el agronegocio, a Aníbal Fernández… claro que no se puede enfrentar a la derecha con ese personal político conservador”.

“Nosotros peleamos todos los días contra esa filosofía de la resignación”, cerró la dirigente del PTS y llamó a “no agachar la cabeza y volver a la espiral de endeudamiento y fuga que nos trajo hasta acá”. |