El fiscal alemán Hans Christian Wolters, responsable de la investigación alemana sobre la desaparición de la niña británica Madeleine McCann sigue defendiendo la culpabilidad del pedófilo convicto Christian Brueckner y dedica todos sus esfuerzos a demostrarlo desde hace más de un año. Pero las autoridades portuguesas han recelado siempre de este giro en la investigación y han defendido que hay muchas dudas al respecto.
Es más, en las reuniones de alto nivel celebradas con los investigadores alemanes y británicos han dejado claro que no creen en esta posibilidad. Sobre todo porque hasta ahora Wolters no ha presentado pruebas concretas que avalen su teoría. Brueckner viajó a Portugal después cumplir una condena por abusos sexuales a una menor en Alemania y se le vincula con otros posibles casos en nuestro país vecino.
Pero la realidad es que sólo disponen de una prueba. El posicionamiento de su teléfono móvil, que lo sitúa a escasos metros de la urbanización de Praia da Luz el día en el que Madeleine fue secuestrada de los apartamentos en los que pasaba con sus padres unos días de vacaciones en mayo de 2007.
Se han escrito ríos de tinta sobre el caso y muchos programas de televisión han tratado de hacer sus propias investigaciones para intentar aclarar todos los puntos oscuros de este caso pero no se han logrado avances. Brueckner ha defendido desde el principio que es un chivo expiatorio y ha denunciado una persecución por parte de Wolters y su equipo.
A pesar de sus antecedentes, de haber alardeado de que le gustaba abusar de niños, cuanto más jóvenes mejor, Brueckner escribió una carta que remitió al diario Bild en el que denunciaba su situación y proclamaba su inocencia.
Pues bien, ahora parece que puede tener alguien que apoye esta teoría. Un equipo de investigadores del canal Channel 5, encabezados por un ex detective, están preparando un documental que puede hacer saltar por los aires la investigación. Según han anunciado, durante la elaboración del documental han conseguido hablar con varios testigos que apuntan a la posibilidad de que Brueckner no tuviera nada que ver.
Según publica el diario “The Sun”, los responsables del trabajo audiovisual de tres entregas, que está previsto que se emita a finales de año, apuntan a la posible implicación en el secuestro de Madeleine de dos ciudadanos rusos. No han aportado más pistas sobre su trabajo, se han limitado a decir que pueden revelar que los investigadores alemanes “no tienen nada concreto” contra Brueckner.
Channel 5 ya emitió un documental sobre la desaparición de la pequeña británica en 2014. “Maddie: A Global Obsession (Maddie, una obsesión global)”, en el que Martin Frizell volvió a Portugal para tratar de reconstruir lo que ocurrió aquélla fatídica noche del 3 de mayo de 2007.
Desde que Wolters anunciara que Christian Brueckner era el principal sospechoso y que el caso estaba resuelto al 90 por ciento, no ha parado de recibir reveses. Ni las investigaciones ni las nuevas pruebas han servido para que el fiscal alemán pueda armar lo suficiente el caso como para poder llevar al pedófilo, de 44 años, ante un tribunal.
A pesar de las críticas por no haber compartido los supuestos avances y las acusaciones de que realmente no tiene nada concreto contra el alemán, ha insistido en que el caso está cerca de resolverse. A principios del pasado mes de junio, Wolters indicó que había localizado a varios testigos que “han dado un impulso a la investigación” que permitirán resolver el caso “en unos meses”.
Sin embargo, el fiscal matizó que no han obtenido respuestas a todas las preguntas, pero que su equipo había recibido información “muy interesante” y que interrogaría al sospechoso al final del proceso. Wouters insiste en que Maddie murió en Portugal y que existen “evidencias concretas” de que su cuerpo está en ese país.|