Ayer la cartera de salud y de Mujeres, Géneros y Diversidad presentó el primer documento específico para un abordaje integral y despatologizante en la atención de la salud de niñeces y adolescencias trans, travestis y no binaries, titulado "Recomendaciones para el Acompañamiento de la Salud Integral de Niñeces y Adolescencias Trans, Travestis y No Binaries". También contó con la participación de madres y padres de niñeces y adolescencias trans.
Durante la presentación, la ministra de salud, Carla Vizzotti, aseguró: "es un día muy importante, de mucha emoción y satisfacción, pero no es casualidad, desde el comienzo de esta gestión las áreas de salud de niñez y adolescencia fueron cambiando a través de la mirada del ministerio de las Mujeres que es un organismo que antes tampoco existía".
"Hay una mirada de la salud que desde el principio tenía esto entre sus objetivos y que venía dando respuesta a cambios en la sociedad y a luchas por derechos que ya estaban desencadenadas; entendimos que la responsabilidad del estado era dar respuestas con la mirada más inclusiva posible", añadió.
"También hay que acompañar a todo el entorno familiar de estas niñeces y adolescencias en estos cambios y en estos procesos", concluyó.
La ministra de Mujeres, Géneros y Diversidades, Elizabeth Gómez Alcorta, destacó: "No es casualidad que hagamos esto en el mes del orgullo y que hace menos de una semana hayamos logrado la sanción de la ley de cupo laboral travesti trans; estas recomendaciones tienen un encuadre de derechos humanos que reconoce la diversidad, es una guía muy hermosa que sitúa cada posibilidad de intervención con una mirada integral".
El documento
El texto indica una serie pautas para garantizar "el respeto y reconocimiento de la diversidad de género, sexual y corporal" y señala la necesidad de que se les reconozca "como personas sujetas de derechos", merecedoras de "un trato digno", para lo cual es importante trabajar para "despatologizar la mirada y asumir que no hay nada que tutelar, normativizar ni curar en relación a las identidades de género".
Enfatiza en que no se trata de "patologías, anormalidades o incongruencias", sino de "vivencias legítimas y formas de expresarse y nombrarse heterogéneas, fluidas y cambiantes". En función de esto, se requiere "evitar juicios de valor", poner en práctica "una escucha atenta y sin prejuicios" y respetar los tiempos de quienes consultan y/o sus acompañantes, expresa el documento.
Respecto a la atención en salud sexual y reproductiva, se afirma que es clave tener en cuenta "las expectativas y necesidades particulares para una vivencia de la sexualidad cuidada y placentera". Si bien la incomodidad con la corporalidad afecta a todas las personas, la presión social "impacta particularmente en las personas TTNB", por lo que es necesario prestar atención a "aquellas que quieran modificar o intervenir su corporalidad".
Resulta central que "el equipo de salud conozca las diferentes opciones y técnicas" y que se respete que, según la normativa vigente, las personas TTNB "son quienes consienten siempre" y que el asentimiento es solo "el acompañamiento de la decisión de la persona titular del derecho", cuando se requiera.
En cuanto a recomendaciones de prácticas básicas, el texto indica preguntar cómo quieren se les nombre, utilizar el nombre de pila y los pronombres de su elección e indicarlo en todo instrumento de registro, coincida o no con el del DNI.
Por último, se resalta el rol que tiene el sistema de salud a la hora de "propiciar el acompañamiento de niñez y adolescentes, abrir espacios de diálogo con la familia y brindarles información", entendiendo que a veces las reacciones en el entorno suelen ser negativas.
El documento completo puede consultarse en https://bancos.salud.gob.ar/recurso/recomendaciones-para-la-atencion-integral-de-la-salud-de-nineces-y-adolescencias-trans.|