En el Día del Animal, conocé los apodos «animalescos» de los políticos y famosos – Negocios & Política
 

Los apodos que mejor sentaron |En el Día del Animal, conocé los apodos "animalescos" de los políticos y famosos

"El pingüino", "El zorro", "El gato", ni tan rimbombantes ni estrafalarios, pero si curiosos. Estos sobrenombres, y otros más, han sabido marcar a lo largo de la historia argentina, a diferentes funcionarios de nuestro país e inclusive gente del espectáculo, hasta llegar a conocerlos solo por ellos.
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De acuerdo al diccionario de la Real Academia Española (RAE), el apodo es el “nombre que suele darse a una persona, tomado de sus defectos corporales o de alguna otra circunstancia”. Lo cierto es que los sobrenombres suelen abundar en el mundo del espectáculo y la política. Basta con la simple mención de ellos, para que el resto de los nombres emerjan solos, sin otra necesidad de ayuda.

Esto se debe, sin dudas, a que los sobrenombres representan una de las formas más extendidas del ingenio nacional, tal como lo asegura Julio Mafud en su ensayo Psicología de la Viveza Criolla: "Los motes, la viveza y la cachada son la creación más peculiar del arte popular argentino".

Suena lógico, entonces, que la mayoría de los personajes que marcó el compás político-económico de la Argentina desde 1810 en adelante cuenten con su correspondiente apodo. Más allá de su intencionalidad, los apodos bien pueden ser considerados como una forma alternativa de ingresar a la historia. Después de todo, suele decirse que lo importante es que se hable bien o mal de alguien, pero que se hable.

Como un recurso que queda “al pelo”, en este Día del Animal queremos recordar a funcionarios y músicos que son y fueron reconocidos por sus sobrenombres animalescos:

El creador de nuestra bandera, Manuel José Joaquín del Corazón de Jesús Belgrano, fue un abogado, economista, periodista, político, diplomático y militar rioplatense conocido como “cotorrita” por la particularidad de vestir siempre de verde, su color predilecto.

Juan Facundo Quiroga un político, militar, gobernador y caudillo argentino de la primera mitad del siglo XIX, fue conocido como “El tigre de los llanos” por su destreza al mando de las tropas montoneras. No todos los apodos enaltecen: en el caso del ex presidente de la Nación (2 de octubre de 1874 – 12 de octubre de 1880), Nicolás Avellaneda, fue recordado como el “Chingolo”, acomplejado siempre por su baja estatura.

Otro ex presidente de la República, Miguel Juárez Celman, conocido como “El Burrito Cordobés”, debido a su débil gestión presidencial, es recordado aún por haber sido incapaz de mantener la estabilidad económica del país y por enfrentar la formación de un poderoso frente opositor: la Unión Cívica.

El primer presidente argentino elegido por medio del sufragio secreto y obligatorio masculino, Hipólito Yrigoyen, era conocido por sus seguidores como “El Peludo”, por su carácter taciturno, ajeno a la exposición pública.

Es malo para un país que ciertos animales tengan la facultad de hablar desde los estamentos de poder. Uno de ellos fue Luciano Benjamín Menendez, un oficial militar argentino que condujo la represión en los años setenta en el III Cuerpo de Ejército durante el Proceso de Reorganización Nacional. Sus amigos le decían “el cachorro” o “el perro”, se relamía de placer escuchando los gritos de tortura en el campo de concentración de “La Perla”.

Arturo Umberto Illia, fue médico y ex presidente de la Nación Argentina entre el 12 de octubre de 1963 y el 28 de junio de 1966, reconocido como “La tortuga” por la supuesta lentitud de su gestión.

El tres veces presidente de la Nación Argentina y fundador del peronismo, uno de los movimientos populares más importantes de la historia de la Argentina, Juan Perón, conocido por su fascinación por los caballos desde pequeño, fue apodado "El Potro". Vigoroso, audaz e inteligente, dijo en una entrevista: “Mi receta es muy simple -confiesa-. Ciento cinco miligramos de hormona de potro todas las semanas. Yo no me tiño el cabello, ¿Sabe usted? Esa fórmula sirve para todo…».

Por su procedencia patagónica y sus características facciones, el ex presidente Argentino, Néstor Kirchner fue apodado “El pingüino”: "Sí, soy un pingüino", admitía Kirchner con orgullo ante los ataques de sus pares políticos.

Pero sin embargo, dentro del universo animalesco, hubo uno que resaltó por diferentes motivos luego de que en Calilegua, a casi un kilómetro de Libertador General San Martín, provincia de Jujuy, el empresario Luis Llanos fuera detenido por gritarle “gato”.

El Presidente Mauricio Macri, fue eco de varios memes relacionado a los felinos. El “gato” ejerce una autoridad prestada ante los demás, que paga con su servilismo ante el jefe, que a su vez, deja en claro todo el tiempo y frente a todos, quién es el jefe y que el respeto requerido para con el “gato”, es en realidad, para con él...”Exponente de este siglo, expresión de este momento, su chatura es el “standard” que circula en la babel. Por adentro es un vacío, por afuera un monumento retocado por la moda con un golpe de pincel. Prototipo de mediocre, sin ideal ni sentimiento, y arrastrado por los vientos como un trozo de papel.” (tango Gato, Homero Manzi, 1937)

El ámbito de la música no fue exento a estos apodos. Quién no recuerda también al ‘Zorzal Criollo’, el universal cantor de tangos, Carlos Gardel. Uno de los pájaros característicos de las pampas, es el zorzal, destacado por la belleza de su canto.

Pero no solo con aves son comparados estos artistas. Los cuarteteros argentinos Carlos ‘La Mona’ Jiménez y Rodrigo Bueno ‘El Potro’, (fallecido en un accidente automovilístico en el 2000), siguen los preámbulos de los sobrenombres.

“La mona”, conocido así porque de chico, cuando jugaba a que era Tarzán, los vecinos le decían “No, vos sos La Mona Chita”, es un intérprete y compositor argentino del género cuarteto. El fallecido Rodrigo, con su pelo corto y teñido y ropa casual difería de cantantes típicos de cuarteto con colores estridentes y el pelo largo rizado, conocido como “El Potro” por su extenso miembro viril, según los rumores de sus amantes.

El 29 de abril, el día de los derechos animalescos…

El Día del Animal se celebra en conmemoración del fallecimiento de Ignacio Lucas Albarracín, un abogado que fue el gran pionero en el país en la lucha por los derechos de los animales.

Albarracín nació en Córdoba capital el 31 de julio de 1850 y tras obtener su título de grado, decidió dedicar su vida a la defensa de los animales. Opinaba que aunque estos tuviesen un nivel de raciocinio inferior respecto del hombre, no se debía martirizarlos ni castigarlos.

Fue secretario de la Sociedad Argentina Protectora de los Animales desde su inicio (1879) y sucedió a Domingo Faustino Sarmiento en su presidencia, en el año 1885. Desde allí fue un precursor en la lucha contra las riñas de gallos, la doma de potros, corridas de toros y tiro a la paloma.

A excepción de Argentina, el Día Mundial del Animal se celebra en el resto del mundo el 4 de octubre, conmemorando a San Francisco de Asís, el santo católico que se despojó de todas sus riquezas y dedicó su vida al servicio no sólo a sus semejantes sino también a todos los animales.

San Francisco nació en Asís (Italia) dentro de una familia acomodada en 1182. Consideraba a los animales hijos de Dios y los llamaba "hermanos". Se dirigía a ellos y se dice que ellos lo escuchaban hasta el punto de obedecerle y es famosa la intervención que tuvo en Greccio al lograr que un lobo salvaje no atacara a la población.

En 1929, esta fecha fue declarada Día Mundial de los Animales, por iniciativa de la Organización Mundial de Protección Animal en congreso celebrado en Viena. En 1980, el papa Juan Pablo II declaró a San Francisco de Asis como patrono de los animales y de los ecologistas.|

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