El Róver Perseverance de la NASA en Marte ha encontrado desechos de su llegada al planeta rojo en febrero de 2021, a dos kilómetros de donde se produjo el aterrizaje. "Mi equipo ha detectado algo inesperado: es un trozo de manta térmica que cree que puede provenir de mi etapa de descenso, el 'jet pack' propulsado por cohetes que me dejó el día del aterrizaje en 2021", comenta la cuenta de Twitter de la misión junto a la imagen del trozo de basura, que ha quedado alojado entre dos piedras.
Este descubrimiento preocupó a la Administración Nacional de Aeronáutica y el Espacio (NASA). Se trata de un trozo brillante de papel aluminio parte de una capa que se usa para controlar la temperatura. La sorpresa por el hallazgo se ve resaltada porque está a dos kilómetros de distancia de donde aterrizó el róver. El equipo de la misión se pregunta si llegó a este punto directamente durante el aterrizaje o fue arrastrada por el viento.
Este no es el único trozo de basura del róver en Marte. El 19 de abril, el diminuto helicóptero Ingenuity de la NASA sobrevoló el caparazón y el paracaídas del róover y tomó fotos increíbles desde diversos ángulos. A medida que las exploraciones aumentan, la basura espacial que estas generan se convierte cada vez más en una preocupación para las agencias espaciales.
Con la misión espacial a Marte se liberan desperdicios terrestres provenientes de las naves o los equipos de investigación. Este problema no sólo ocurre en otros planetas o en la Luna. Distintos científicos encontraron desechos como satélites viejos y sin funcionamiento, herramientas y metales en la propia órbita terrestre.
Los fragmentos de las misiones que quedan en el espacio pueden contaminar cuerpos planetarios que de otro modo serían prístinos. Algo que iría en directa contravía con la misión Perseverance, el cual busca indicios de vida antigua en Marte y recoge muestras para su futuro retorno a la Tierra.