El ministro de Seguridad bonaerense, Sergio Berni, fue agredido e insultado cuando llegó a la protesta de colectiveros en La Matanza, tras el crimen de un chofer.
El funcionario provincial se acercó hasta el cruce de General Paz y Ruta 3 para intentar dialogar con los trabajadores que realizaban un corte en repudio del asesinato de un colectivero y para reclamar mayor seguridad en los recorridos.
Sin embargo, apenas llegó fue recibido con insultos y luego la situación derivó en golpes de puño contra Berni, quien fue herido en su rostro, así como también recibió pedradas.
"Mentiroso, nos mentiste", le gritaron al ministro al llegar al lugar y previo a recibir una violenta agresión.
En medio de la tensa situación, Berni afirmó que pretendía permanecer en el lugar para dialogar con los trabajadores: "Estoy acá por lo que está pasando. Me banco lo que sea. Pero quiero hablar con los choferes, porque de esta manera no se va a resolver nada".
Pese a su intención, para evacuarlo debió intervenir la Guardia de Infantería de la Policía de la Ciudad, ya que estaba en el límite entre Lomas del Mirador y Mataderos, del lado porteño.
Horas más tarde, Berni sostuvo que sufrió una fractura en el maxilar al ser agredido por choferes de colectivo y aseguró que le "duele más que un bonaerense haya sido asesinado" en alusión al crimen del conductor en Virrey del Pino, que los golpes que recibió.
El ministro habló en la puerta del Hospital Churruca, donde fue asistido por heridas en el rostro y el resto del cráneo, tras recibir trompadas y pedradas.
Por otro lado, sostuvo que si bien "la Policía de la Ciudad cumplió con el protocolo" al rescatarlo cuando era agredido por los choferes que realizaban una protesta en General Paz y Alberdi, la fuerza "complicó las cosas".
"Les pedí que no avanzaran porque se estaban resolviendo las cosas y teníamos la situación controlada. Ya habíamos acordado una reunión", dijo sobre la acción de los policías porteños, en la que ocho efectivos también resultaron heridos.
Berni señaló que no va a denunciar a los choferes que lo agredieron: "Estoy bien, un golpe más no hace mella. Duele más que un bonaerense que tengo que cuidar murió que los golpes que recibí", expresó en rueda de prensa.