Ante la crisis económica del país, los actos del Primero de Mayo estuvieron divididos. La Unión de Trabajadores de la Economía Popular apoyó las políticas del Gobierno. La CGT y las agrupaciones K, no participaron. La izquierda marchó a Plaza de Mayo.
Organizaciones sociales y políticas alineadas a la Casa Rosada se movilizaron bajo la consigna “techo, tierra y trabajo”. De los actos no participaron la CGT ni las agrupaciones más vinculadas al kirchnerismo como La Cámpora. Diferenciándose del oficialismo, sectores de la izquierda marcharon hacia Plaza de Mayo en rechazo al acuerdo con el Fondo Monetario Internacional(FMI), el “ajuste” económico y en demanda de “recuperación salarial” para los trabajadores.
Solo cinco cuadras separaban el escenario armado por la Unión de Trabajadores y Trabajadoras de la Economía Popular (Utep) –cercanos al presidente Alberto Fernández– y la marcha organizada por Frente de Izquierda Unidad (FIT-U). La razón de la distancia cobró sentido luego de escuchar los discursos de los dirigentes de izquierda contra el oficialismo.
La Utep, sector afín al Gobierno de Fernández, marchó para exigir una “ley general de tierra, techo y trabajo que incluya medidas urgentes para transformar la realidad del sector más postergado”, marcaron en un comunicado.
En síntesis, la Utep: 1– Reclamó al Congreso una agenda legislativa que contenga un “paquete de Tierra, Techo y Trabajo”. 2– Respaldó las políticas impulsadas desde la Casa Rosada. 3– Apuntó contra los sectores políticos que “intentan debilitar y voltear al Gobierno”.
El escenario central, que estuvo situado en 9 de Julio y Avenida de Mayo, tuvo cinco oradores de los cuales se destacaron los discursos de Gildo Onorato, del Movimiento Evita; Dina Sánchez, del Frente Popular Darío Santillán, y Esteban "Gringo" Castro, de la CCC.
La UTEP –integrada por el Movimiento Evita, la Corriente Clasista y Combativa (CCC) y el Movimiento Somos Barrios de Pie–, el Frente Popular Darío Santillán (FPDS), el Partido Comunista, el Partido del Trabajo y del Pueblo (PTP), la organización Los Pibes, el Movimiento Octubres, el MP La Dignidad, la JP Evita y el Frente Milagro Sala, entre otros.
El presidente saludó a los trabajadores con un mensaje desde sus redes sociales. “Este domingo les deseo un feliz día del Trabajador y la Trabajadora. Lo celebramos creando trabajo. El empleo privado creció durante 13 meses consecutivos”, escribió desde su cuenta de Twitter.
“Ya pusimos en marcha la economía. Ahora, estamos recomponiendo el salario en toda la Argentina. En febrero aumentaron 3,1% y seguiremos haciendo todo para que le ganen a la inflación”, cerró Fernández.
Aunque por el momento se encuentra alineada con el presidente, la Confederación General del Trabajo (CGT) decidió no participar del acto y en su lugar publicó un comunicado crítico de la situación socioeconómica. Además, consideraron que las medidas tomadas por el jefe de Estado para paliar la crisis “generan un alivio transitorio”.
“Es hora de que los formadores de precios, los grandes especuladores financieros que multiplican sus ganancias en la crisis, asuman su responsabilidad y contribuyan a mitigar una desigualdad social que hoy resulta intolerable”, indicaron en un comunicado.
El Frente de Izquierda Unidad (FIT-U) realizó su propia celebración del Día del Trabajador en la Plaza de Mayo con la presencia de sus diputados y diputadas nacionales, dirigentes obreros y sociales.
“Con el astronómico 6,7 % (en marzo), se acumula ya un 16,1 % (de inflación) en el primer trimestre del año. Los aumentos de alimentos y otros productos de la canasta familiar fueron mayores aún, golpeando los ya bajos salarios”, indicó en un comunicado el FIT-U.
“El Gobierno peronista de Alberto Fernández trata de disimular la situación con medidas cosméticas y totalmente insuficientes, que no cubren ni de lejos la canasta de indigencia que supera los 40.000 pesos (346 dólares)”, explicaron.
La primera en tomar la palabra fue la diputada nacional por el Partido Obrero (PO) Romina Del Pla, que le apuntó directo al Frente de Todos: “América Latina está recorrida por enormes rebeliones populares que no pueden contener los gobiernos que se autodenominan nacionalistas. En Argentina, el Frente de Todos es un gobierno ajustador, por ejemplo ajusta a través de la inflación y que utiliza la represión. Hay un aumento de la precarización y de la pobreza”.
El cierre del acto estuvo a cargo de la diputada nacional por el Frente de Izquierda, Myrian Bregman. “El gobierno que dijo que venía a enfrentar a la derecha, nos ató nuevamente al FMI. Pero no solo eso, sino que se sacan fotos sonrientes con la Jefa del Comando Sur de EEUU -la generala Laura Jane Richardson-, que fue la institución que creó la Escuela de las Américas, donde llevaron a los genocidas de la región para enseñarles a torturar”, apuntó.
Su discurso también fue contra el ex presidente Mauricio Macri y el diputado Javier Milei: “También se encuentra la variante liberal que levanta el programa económico de la dictadura. Después lo profundizó el gobierno peronista, de Carlos Menem; hace poco, Macri volvió a insistir en ése plan y llevó a la argentina a un desastre. Ahora, su más férreo defensor en Javier Milei”.