El Tribunal Oral en lo Penal Económico Nº1 ordenó la inmediata libertad de José Alberto Samid y se le exigió fijar un domicilio, además de comparecer frente al Tribunal de forma mensual. La causa contra Samid se inició en 1996, pero la evasión prescribió con el paso del tiempo y no formó parte del juicio. Esa condena sigue bajo revisión de la Corte Suprema.
Tras un paso breve por el penal de Ezeiza, en junio de 2019 recibió la prisión domiciliaria por su estado de salud. Ese mismo año se había fugado cuando estaba terminando el juicio: salió del país el 24 de marzo rumbo a Paraguay. De allí tomó un avión a Panamá el 26 y otro a Belice. La Justicia le dictó la prohibición de salida del país el 27 de marzo y el 3 de abril de ese año ordenó su captura nacional e internacional porque no se presentaba a las audiencias del juicio, hasta que finalmente fue arrestado por Interpol.
Pese a violar la condena, en noviembre de 2020 fue autorizado por el TOPE 1 a trabajar los lunes, miércoles y viernes de 9 a 13 horas en el Mercado Central.
Panorama general
El fallo que lo excarceló fue firmado por los jueces Luis Gustavo Losada, Ignacio Carlos Fornari y Diego García Berro. Tras conocerse la noticia, Samid lo comentó a través de su cuenta personal de Twitter: “A mis campañeros y amigos: les cuento que a partir de hoy quedé en libertad”.
Este miércoles, la Cámara Federal de Casación Penal anuló una resolución que rechazó excarcelar al empresario y ordenó dictar un nuevo fallo al Tribunal Oral que lo condenó a cuatro años de prisión por asociación ilícita.
Ante esta situación, la defensa del acusado recurrió a Casación y la sala IV anuló esa negativa, ordenando dictar una nueva decisión que tome en cuenta el tiempo de detención que Samid lleva ya cumplido y que lo pondría en condiciones de obtener la libertad condicional, considerando también su edad (74) y el estado de salud.
La pena del empresario se cumplirá el 5 de abril de 2023.|
