El desembarco de Sergio Massa en el Gabinete nacional también repercutió en la Confederación General del Trabajo (CGT), que dejó de lado las disputas que sus conductores mantuvieron en el último tiempo sobre sus posicionamientos frente a la crisis política, económica y social del país, y respaldó su designación.
"Hay un cambio de expectativas en toda la sociedad, a pesar de que hay sectores que lo único que buscan es la desesperanza, porque están pensando en el 2023", destacó Héctor Daer, secretario general de la CGT y del sindicato de Sanidad, sobre la llegada de Massa al Palacio de Hacienda como "superministro".
"La llegada de él, sumada a la de un gobernador en la Jefatura de Gabinete (por Juan Manzur), le da un volumen diferencial para enfrentar este momento", agregó, y dijo que hay una "necesidad de centralizar la toma de decisiones" en el plano económico.
Su par Carlos Acuña, líder del sindicato de Obreros y Empleados de Estaciones de Servicio, coincidió en respaldar la llegada de Massa al Gabinete nacional.
"Tengo mucha confianza que va a hacer las cosas bien porque no solo se necesitan buenos técnicos, hay que saber utilizar la economía del país a favor del país", opinó, y destacó su trayectoria: "Fue diputado, estuvo en la ANSeS y se desempeñó como intendente de Tigre, donde prácticamente transformó ese municipio".
Ambos confirmaron que la movilización del 17 de agosto se mantiene en pie con "los formadores de precios" como los principales apuntados, lo que buscan traducirlo como un respaldo al gobierno de Alberto Fernández.
En sus dos años y ocho meses de gestión, el mandatario ha tenido una relación cercana con buena parte del sindicalismo burocrático, que evitó hacerle paros generales y se mantuvo a su lado pese a las críticas de la vicepresidenta Cristina Kirchner y en medio de las disputas internas en el oficialismo.
También se pronunció la tercera pata del triunvirato cegetista, Pablo Moyano, que ha mantenido diferencias en el último tiempo con los otros dos conductores a raíz de su deseo de una agenda más activa en la calle y su cercanía con sectores más afines al kirchnerismo duro.
De hecho, el pasado 26 de julio faltó al homenaje oficial de la CGT por el aniversario del fallecimiento de Eva Perón e hizo su propio acto. Sin embargo, esta vez el secretario adjunto del sindicato de Camioneros dejó de lado sus críticas y celebró la irrupción de Massa.
"Creo que cada cambio genera una nueva ilusión, una nueva esperanza, nuevos aires. Uno, que tiene llegada y contacto con Sergio, puede decir que está convencido por la experiencia que tuvo al haber estado en la intendencia de Tigre y con todos los cargos que tuvo", elogió.
En paralelo, sin embargo, hizo una advertencia: "Creo que es la última alternativa que tiene nuestro Gobierno para ir mejorando el tema económico y poder llegar a las elecciones con la posibilidad de reelegir o de elegir al nuevo candidato o candidata del peronismo".
Durante el mes pasado, la cúpula de la CGT se vio cada vez más suscripta a las internas del Frente de Todos. Ante el aumento de las demandas sociales y una inflación que come a paso agigantados los bolsillos, se vivieron semanas agitadas en la central obrera, con rumores de rupturas y renuncias.
En ese tiempo, ni siquiera hubo un pronunciamiento sobre la fugaz estadía de Silvina Batakis al frente del Palacio de Hacienda.
"Le faltó volumen político", reconoció Daer ahora. Pero, al igual que en el Gobierno nacional, en la "mesa chica" del sindicalismo hoy esperan que la llegada de Massa pueda finalmente canalizar las discrepancias y ser el puente entre las partes.|