Los gremios docentes porteños UTE (Unión de Trabajadores de la Educación) y Ademys (Asociación Docente de Enseñanza Media y Superior) dispusieron continuar hoy con el paro en rechazo a la presencialidad de las clases que dispuso el Gobierno porteño, pese al fallo de un juzgado federal de suspender esa disposición y cumplir el Decreto de Necesidad y Urgencia (DNU) del Ejecutivo nacional, que disponía, entre otras cosas, cerrar durante dos semanas los colegios en la zona del AMBA.
Tanto la UTE, afiliada a la Confederación de Trabajadores de la actividad (Ctera), como Ademys determinaron continuar con la medida de fuerza por 48 horas. En su cuenta de Twitter el secretario General de UTE, Eduardo López, comunicó: "La Lucha continúa. Mañana miércoles 21 (por hoy) Paro Docente en la Ciudad".
En este sentido, Ademys llamó a una protesta en rechazo de "la decisión del Gobierno de Horacio Rodríguez Larreta", mientras el Sindicato Argentino de Docentes Privados (Sadop) no convocó a un paro, pero determinó la aplicación de "una retención de tareas presenciales".
"Desde hace semanas la UTE exige a las carteras de Salud y Educación y al propio Gobierno porteño la adopción de medidas de cuidado urgente ante el aumento exponencial de casos de contagio y la saturación del sistema sanitario", indicaron. Por otra parte, afirmaron que Rodríguez Larreta "no ofreció respuestas, pero interpuso trampas jurídicas para frenar el decreto que suspendió la presencialidad por 15 días".
El conflicto por la vuelta a clases presenciales también hizo eco en la provincia de Buenos Aires a raíz de la presentación de un amparo solicitado por parte de los Municipios de Vicente López y San Isidro, cuyos intendentes son Jorge Macri y Gustavo Posse, en contra del decreto 241 en el cual el presidente de la Nación, Alberto Fernández, suspendió hasta el 30 de abril las clases presenciales en el AMBA por el aumento de casos de coronavirus.
Siguiendo esta línea, el abogado Diego Isabella se presentó ante la Corte Bonaerense en representación de sus dos hijas para que vuelvan las clases presenciales y pidió que se declare la inconstitucionalidad de la medida. Solicitó que mediante una medida cautelar se ordene el regreso de las clases presenciales en todo el Conurbano Bonaerense, o bien de mínima en el colegio de sus hijas.
Mientras que los padres de un colegio privado de San Isidro, “El Buen Ayre”, decidieron organizarse y armar una suerte de aula en una plaza cercana al instituto. “Intentamos que los chicos no focalicen su atención en un zoom y continúen con la interacción humana. Con la sociabilización. Teníamos muchas actividades programadas para estas dos semanas y decidimos venir a una plaza y hacer lo mismo que estarían haciendo frente a una pantalla”, afirmó la madre de uno de los alumnos en dialogo con TN.
Finalmente, la justicia en lo Civil y Comercial de San Isidro se declaró incompetente para entender en la acción de amparo presentada por los intendentes, contra la suspensión de las clases presenciales y sostuvo que debe intervenir la Suprema Corte de la provincia de Buenos Aires. |