Tras un extenso debate de más de cinco horas, el Senado aprobó esta noche y convirtió en ley, el nuevo marco regulatorio para la producción de biocombustibles que propone un corte del 5% para el gasoil y el biodiesel y del 12% entre naftas y bioetanol. 

La norma fue aprobada por 43 votos a favor y 19 en contra, y dejó sin efecto la prórroga que, mediante un decreto, estableció el Poder Ejecutivo esta semana para el proyecto que regía desde hace 15 años.  

En el mismo debate se sancionó un proyecto que crea el Programa de Fortalecimiento y Alivio Fiscal para Pequeños Contribuyentes que permitirá que los monotributistas no deban afrontar ninguna deuda acumulada por la diferencia resultante entre lo que pagaron entre enero y junio y los nuevos valores establecidos por la Ley 27.618. 

Además, el Senado avanzó de manera definitiva un expediente que reforma los Impuestos a las Ganancias y Bienes Personales con el fin de fomentar el ahorro en pesos destinado a ampliar las exenciones en los mencionados Impuestos para los activos de inversiones financieras en moneda nacional. 

En una intensa jornada también obtuvieron media sanción el marco regulatorio para el desarrollo industrial del cannabis medicinal y el cáñamo. 

El nuevo marco regulatorio para los biocombustibles, recibió el visto bueno en Diputados a principios de mes, luego de encuentros y desencuentros entre sectores del oficialismo y la oposición que mostraban distintas posturas respecto al foco de la norma que busca brindar certidumbre y condiciones que permitan el desarrollo de una actividad diversificada, pero al mismo tiempo apunta a evitar la concentración en el sector. 

El régimen, creado en un primer momento por el ex presidente Néstor Kirchner para promover la producción y utilización de energía alternativas, según datos oficiales, generó inversiones por más de 1.000 millones de dólares y la creación de 54 plantas en 10 provincias, en los últimos 15 años. 

Actualmente, la provincia de Santa Fe concentra un 82% (18 plantas) de toda la capacidad productiva de biodiesel del país, principalmente en la zona del Gran Rosario.  

Nuevo escenario 

"Esta actividad genera inversiones por más de 3.000 millones de dólares, se crearon nuevas empresas, 54 plantas industriales distribuidas en 10 provincias argentinas. Se crearon 80 mil trabajos directos y más de 200 mil indirectos", dijo el senador por San Juan, Rubén Uñac (FdT) y destacó que " a 15 años de la creación de esta ley, el escenario ya no es el mismo y es necesario contemplar la diversidad de esta industria en la que cohabitan grandes industrias con Pymes. Ubicadas en provincias con realidades muy diferentes". 

Por otro lado, el senador por Formosa, Luis Naidenoff (JXC) señaló que "la primera parte de la Ley es misión cumplida" pero aseguró que "el cuello de la matriz productiva en la Argentina está en la cuestión energética" y afirmó que esta ley “es un error” que "afecta el horizonte de previsibilidad del país''.  

"Este Senado en su sanción de fines del año pasado se propuso prorrogar para ganar tiempo para avalar a este sector", agregó y aunque consideró que el tema "fue una verdadera política de Estado", cuestionó "qué pasó para que ahora estemos tratando un nuevo régimen. No es una buena ley y el propio oficialismo lo reconoce".   

Por último, Naidenoff señaló que "quienes creen que pueden controlar los precios de los combustibles con esta ley se equivocan. Hoy llenar un tanque combustible cuesta un 60 por ciento más que el año pasado. Este aumento le ganó a la inflación. ¿Le van a echar la culpa a los biocombustibles?" y apuntó que "los grandes ganadores con esta ley son las petroleras. Y claramente YPF que con esta ley mejora sus balances".  

Desde el oficialismo, el senador por Formosa, José Mayans (FdT) señaló que "si el sistema no se cuida en su integralidad es muy difícil que el sistema económico funcione" y aclaró que con esta ley "no será afectada ni la industria del biodiesel, ni la industria del etanol". Aunque reconoció que "no es fácil resolver los problemas económicos en el contexto de la actual pandemia". Destacó que "gracias a la vacunación los daños de la pandemia están disminuyendo".  

“La economía tiene que crecer y el plan es resolver el endeudamiento externo que nos dejaron, con un crédito que no fue autorizado por el Congreso", dijo y agregó:  "tenemos la obligación de reconstruir el desastre que nos dejaron. Estamos decididos a cambiar el rumbo del país para fortalecer la producción y el trabajo". 

Por otro lado, la radical Silvia Elías de Pérez, sostuvo que "como tucumana y defensora del bioetanol, acompañaré esta ley, aunque votaré en contra del artículo ocho que habla de la mezcla de los combustibles". 

El artículo 8 del proyecto sobre Biocombustibles que propone que, en el caso del combustible elaborado a base de caña de azúcar, los volúmenes deberán ser del 6% de la mezcla mínima obligatoria, mismo porcentaje para el bioetanol a base de maíz, se votó en particular y obtuvo 38 votos positivos, 21 negativos y 3 abstenciones.  

El tema que pone en jugo interés de distintas provincias con capacidad de producir biocombustible, principalmente las tradicionales petroleras versus las agroindustriales y, dentro de estas últimas, las que utilizan derivados de granos y las azucareras, generó acalorados debates en los últimos meses. 

En ese sentido, los principales cuestionamientos provinieron de los senadores de Córdoba, Santa Fe y Entre Ríos, distritos que son productores de granos.  

Apropósito, durante su primera sesión como senadora nacional por la provincia de Santa Fe, y luego de jurar en reemplazo de Carlos Reutemann, Alejandra Vucasovich afirmó que el proyecto impulsado por el gobierno para recortar a la mitad el corte de biodiesel y congelar el de bioetanol, producirá un “gravísimo efecto social y económico” para su provincia. 

“Hoy nos están sacando fuentes de trabajo. Nos están destinando al fracaso total”, apuntó la senadora contra el gobierno en su discurso. “Si solo había que prorrogar este proyecto (Ley 26.093) para q las empresas no se caigan, para que las fuentes de empleo sigan estando, ¿por qué tenemos que ver como Brasil aumenta el corte y nosotros lo reducimos a la mitad? ¿A beneficio de qué, a beneficio de quién? Pierden los empresarios, pierden los empleados, pierde la provincia, pierde la Nación. Perdemos la posibilidad de seguir insertándonos un poco más en el mundo” lanzó la senadora santafecina. 

Finalmente, Vucasovich recordó en su discurso que la provincia de Santa Fe produce el 70% del biocombustible que se produce en el país y, para cerrar su exposición, sentenció: “acá el federalismo no existe, solo es un título de la república, pero en el ejercicio real de la democracia nos sentimos provincias de segunda y ciudadanos de cuarta. Me encantaría saber a quién beneficiamos”. 

Sin embargo, la peronista santafesina María de los Ángeles Sacnun, enfatizó que "este proyecto va hacia un modelo de desarrollo integrado y no estoy de acuerdo con el lobby petrolero ni con el cerealero". 

"La concentración impide la proliferación de pymes. Esta ley contribuye a romper con ese lobby y a generar un modelo de país más federal y equilibrado", explicó. 

El Marco Regulatorio de los Biocombustibles contempla, entre otras, las siguientes consideraciones: 

• Se define como biocombustible al bioetanol y al biodiésel que cumplan los requisitos de calidad que establezca la autoridad de aplicación y que se produzcan en plantas instaladas en la República Argentina a partir de materias primas nacionales cuyo origen sea agropecuario, agroindustrial y/o provenga de desechos orgánicos.  
   
• Se dispone que solo podrán elaborar, almacenar y/o comercializar biocombustibles, o llevar a cabo la mezcla de estos con combustibles fósiles en cualquier proporción, las empresas que se encuentren debidamente habilitadas a tales efectos por la autoridad de aplicación. Caso contrario, la actividad será considerada clandestina. 
   
• Se establece que las empresas que produzcan y/o destilen hidrocarburos no podrán ser titulares o tener participación en empresas y/o plantas productoras de biocombustibles. 
   
• Se establece que todo combustible líquido clasificado como gasoil o diésel oil -conforme la normativa de calidad de combustibles- que se comercialice dentro del territorio nacional deberá contener un porcentaje obligatorio de biodiesel del 5 % medido sobre la cantidad total del producto final. La autoridad de aplicación podrá elevar este porcentaje cuando lo considere conveniente en función del abastecimiento de la demanda, la balanza comercial, la promoción de inversiones en economías regionales y/o razones ambientales o técnicas. También podrá reducirlo hasta un 3 % cuando el incremento en los precios de los insumos básicos para la elaboración del biodiésel pudiera distorsionar el precio del combustible fósil en el surtidor, o bien ante situaciones de escasez de biodiésel por parte de las empresas autorizadas por la autoridad de aplicación para el abastecimiento del mercado. 

• Se establece que todo combustible líquido clasificado como nafta ¿conforme la normativa de calidad de combustibles, que se comercialice dentro del territorio nacional deberá contener un porcentaje obligatorio de bioetanol del 12 %.  
   
• Se dispone que las empresas responsables de llevar a cabo las mezclas obligatorias de biocombustibles con combustibles fósiles deberán adquirir, sin excepción, la totalidad de aquellos exclusivamente de las empresas elaboradoras autorizadas a tales efectos por la autoridad de aplicación, de acuerdo a los parámetros de precio y distribución de cantidades establecidos en esta ley. |