En un contexto de máxima tensión social por la crisis económica que atraviesa el país, Alberto Fernández fue anfitrión durante el seminario internacional "El futuro de la integración: Unidad en la Diversidad" de la CELAC en el Centro Cultural Kirchner.
En ese contexto, el jefe de Estado disparó: "Cuando escucho que Cuba ha desarrollado 4 o 5 vacunas contra el Covid y no las puede industrializar porque por los bloqueos que tiene carece de la capacidad financiera que necesita para poderle dar salud a todos los pueblos del mundo, yo sufro profundamente", reflexionó al pedir el cese de bloqueos y abogar por la unidad de los países latinoamericanos.
En esa línea, continuó: "Un bloqueo que además lleva más de seis décadas y ahora Venezuela, que esperemos que eso se termine pronto. Esperamos que el bloqueo se termine y que los venezolanos vivan en democracia eligiendo libremente como ellos quieran".
En otro tramo de su discurso, el mandatario afirmó que los países de la región no pueden "dominar la nueva realidad geopolítica" derivada de la guerra en Ucrania, pero sí "el camino que asuma nuestro continente".
"Podemos tomar la decisión de unirnos para enfrentar cualquier mal momento, cualquier tragedia que se avecine, en unidad y con fuerza", argumentó el jefe de Estado, luego de apuntar contra los "promotores pasivos de la guerra". En ese sentido, precisó: "Hay una suerte de promotores pasivos de la guerra que no mandan tropas pero mandan armas y dejan que toda esa zona se recaliente, que el conflicto escale y las vidas se sigan perdiendo".
Al referirse a la pandemia de coronavirus, el Presidente expresó: "No sabemos todavía cuántos han muerto en la pandemia, según dice Naciones Unidas entre 6 millones y 10 millones de personas. No tenemos el número exacto. En cualquier caso, lo que sabemos es que la pandemia se llevó entre uno y dos holocaustos. Es un montón de gente, es una tragedia inmensa".
Por último, Fernández calificó como "muy penoso" el hecho de que la "división" de la región no haya permitido "negociar vacunas en mejores condiciones para el continente".
Cumbre en medio de disturbios
Mientras el Presidente participaba del seminario de la CELAC, una protesta frente a Casa Rosada terminó con la intervención de personal policial, luego de que los manifestantes comenzaran a arrojar piedras y antorchas encendidas por encima de la reja al edificio ubicado en Balcarce 50.
Si bien se trató de un grupo pequeño, la Policía tuvo que interceder para contener la protesta, que tuvo como eje el cuestionamiento a las políticas del gobierno de Alberto Fernández.
Además, los participantes de la protestas lanzaron insultos contra el Presidente y colocaron sobre la plaza una representación de una horca, en medio de banderas argentinas.
La última vez que se dio una manifestación frente a Casa Rosada fue hace dos semanas, cuando asumió el ministro de Economía, Sergio Massa, y un grupo pequeño atacó a golpes la camioneta en la que se trasladaba.|