La compañía automotriz estadounidense Tesla demandó al Gobierno de Estados Unidos ante la Justicia local por considerar “ilegales y arbitrarios” los aranceles impuestos sobre algunos productos importados desde China.
En una querella presentada ante el Tribunal Internacional de Comercio de Nueva York, Tesla pidió la “anulación” de los aranceles adicionales de 25% adjudicados por la administración de Donald Trump sobre piezas importadas por la firma, como las pantallas utilizadas en sus autos, y los calificó como "arbitrarios, caprichosos y un abuso de poder”.
En consecuencia, la compañía estadounidense fabricante de vehículos eléctricos reclamó ser “compensada con intereses”, según consignó la agencia de noticias AFP. La presentación judicial se realizó en un documento de 17 páginas donde se objetaron las medidas impuestas por el representante estadounidense de Comercio, Robert Lighthizer.
A pesar de un primer acuerdo comercial entre Washington y Pekín a fines del año pasado, los aranceles adicionales del 25% siguen vigentes sobre unos US$ 250.000 millones en mercancías de origen chino.
Estados Unidos busca con estos impuestos reducir su déficit comercial con China y presionar para que Beijing reforme sus prácticas comerciales que Washington considera "desleales", en particular en materia de transferencia de tecnología, según AFP. Sin embargo, para la empresa de Elon Musk los aranceles "son ilegales, arbitrarios y caprichosos".