La energética estatal Nucleoeléctrica Argentina SA (NA.SA) y la Corporación Nuclear Nacional de China (CNNC) firmaron este martes el contrato para la construcción de la cuarta central nuclear argentina, Atucha III, un reactor de 1.200 megavatios eléctricos (Mwe) que se instalará en el Complejo Nuclear Atucha de la localidad bonaerense de Lima.
La agencia de noticias estatal Télam informó que el evento se realizó de manera virtual por las restricciones sanitarias vigentes y, junto con las autoridades de ambas compañías, estuvieron presentes el gobernador bonaerense, Axel Kicillof, el embajador chino en la Argentina, Zou Xiaoli, su par argentino en China, Sabino Vaca Narvaja, y el subsecretario de Energía Eléctrica de la Nación, Federico Basualdo.
Sólo invitados K
En un principio, se esperaba la participación del presidente Alberto Fernández, del Canciller Santiago Cafiero, del secretario de Energía de la Nación, Darío Martínez y hasta del ministro de Economía, Martín Guzmán. De hecho, desde NA.SA estuvieron hasta último momento comunicándose con el Palacio San Martín y con el jefe de la cartera de Energía para las cuestiones protocolares. Pero de repente lo previsto se derrumbó.
La ausencia de los cuatro funcionarios del Poder Ejecutivo habría estado vinculada a las diferencias que hay en el oficialismo por el preacuerdo con el Fondo Monetario Internacional, que derivó ayer en la renuncia de Máximo Kirchner a la jefatura del bloque del Frente de Todos en la Cámara de Diputados.
Sin embargo, una fuente del ministerio de Relaciones Exteriores descartó que haya sido así. “Desde acá nos estamos ocupando de la gira presidencial a Rusia, China y Barbados, no estaba planificado que Cafiero participe”, argumentó.
El jueves pasado, mientras Fernández leía junto Guzmán y el presidente de la Cámara Diputados, Sergio Massa, los detalles del preacuerdo con el Fondo Monetario, Vaca Narvaja mantenía una video conferencia con la vicepresidenta Cristina Fernández de Kirchner. El embajador le comunicó que el contrato para la cuarta central nuclear ya estaba listo para la firma, y la líder del Frente de Todos lo festejó y le dijo que avance con la firma “cuanto antes”. Así lo había confirmado a Negocios & Política una fuente de Cancillería.
“Fue un acto K. Los que estuvieron son todos del riñón de Cristina, menos los chinos”, bromeó una fuente del Gobierno. En la secretaría de Energía “Martínez y Basualdo prácticamente ni se hablan. Antúnez no está en ninguna interna, pero él sabe que no volvió por Alberto, sino por Cristina”, agregó.
Un contrato millonario con poco festejo
Tal como lo anunció Negocios & Política este lunes, el contrato contiene los detalles del financiamiento y plazos. El proyecto forma parte del Plan de Acción de NA.SA, aprobado por el Poder Ejecutivo Nacional el 23 de junio del año pasado y gestionado intensamente por el embajador Vaca Narvaja.
Atucha III contempla la construcción de una central nuclear con tecnología Hualong. Se trata de un reactor de 1.200 MW que permitiría sostener la capacidad instalada de origen nuclear en la matriz energética y se ubicará en el Complejo Nuclear Atucha situado en la localidad bonaerense de Lima.
La inversión supera los 8.000 millones de dólares, que abarcaría el 85% del precio del reactor, y será financiada por un consorcio de bancos chinos liderado por el Banco Industrial y Comercial de China (ICBC).
La central, del tipo HPR-1000, utilizará uranio enriquecido como combustible y agua liviana como refrigerante y moderador. Tendrá una potencia bruta de 1.200 MWe y una vida útil inicial de 60 años, y permitirá ampliar las capacidades nucleares nacionales gracias a la transferencia de tecnología para la fabricación de elementos combustibles.
De acuerdo con los cronogramas previstos, las obras de construcción comenzarán a fines del corriente año y requerirán la creación de más de 7.000 empleos y una integración aproximada del 40% de proveedores nacionales.
Las voces autorizadas
Según informó Télam, Antúnez remarcó la importancia de avanzar en acciones concretas “para que podamos abastecer la demanda eléctrica de la Argentina con energía de base, limpia, segura y sustentable, y combatir los efectos del cambio climático que afecta al planeta”.
Por su parte, Kicillof destacó que “todos sabemos que sin energía no tenemos desarrollo ni futuro posible, por lo que es para mí un enorme placer acompañar esta firma”.
Desde Nucleoelécrica destacaron que “este importante acontecimiento representa el fin de un ciclo de cooperación y entendimiento mutuo que se inició en junio de 2010 y el inicio de uno nuevo, que ambas empresas prevén será de auspiciosa prosperidad para las dos naciones, y fortalecerá los lazos para el desarrollo pacífico de la ciencia y tecnología nuclear, la generación de energía limpia y el desarrollo industrial”.
La construcción de una nueva central nuclear –informó Télam– permitirá sostener la diversificación de la matriz energética y asegurar el suministro de energía confiable, segura y limpia. A su vez, el sostenimiento de la energía nuclear como fuente de generación contribuirá con el cumplimiento de los compromisos internacionales asumidos por la Argentina en materia climática. |