-Alberto Vitalio: Al final tenía razón usted. Bajan retenciones. ¿De cuánto va a ser el "dólar zanahoria" para que liquiden? 
-Informante: Vio que yo le dije. Con en el nuevo esquema el dólar zanahoria para el campo va a estar en torno a los 62 pesos. Igual si se lo compara con la brecha del Blue y el Contado con Liquidación (CCL) es más del 80%, no es negocio para el campo. Lo que pasa es que es una señal fuerte, sobre todo para la carne. Piense que la soja actualmente tributa una retención del 33%, y pasaría al 30% durante los próximos 90 días. Pero la carne bovina que hoy paga 9% pasaría al 5% de manera definitiva. 
El tema es simple: en el mercado de granos todos saben que la soja va a subir porque China se está despertando del letargo de la Covid-19. Ya se ve en la cotización de los granos, no se olvide que la soja ya está a 380 dólares la tonelada y en diciembre se espera que este por arriba de los 420 dólares por tonelada. 
Según las estadísticas oficiales actualmente hay alrededor de 17,4 millones de toneladas de soja en los silos en manos de los productores, por lo que haciendo el cálculo más conservador son 600 millones de dólares en divisas en lo que resta del año. Igual lo importante es la carne: Argentina exportaría en 2020 cerca de 870.000 toneladas de carne bovina a China, igualando las exportaciones del año pasado. El 75% de las exportaciones de carne bovina argentinas tuvieron como destino al gigantesco mercado chino el año pasado. No se olvide que la exportación de asado argentino a Pekín nunca paro durante toda la pandemia. El lunes, Pekín llamó a los importadores chinos a prohibir la entrada de alimentos congelados de países que sufren de brotes severos de coronavirus, después de varios casos en que los productos arrojaron positivo de COVID-19. Pero la Argentina no está entre ellos. El martes, Alberto y Xi Jingping hablaron 45 minutos. Otra cosa: por la pandemia ambos países acordaron que, de registrarse un caso de coronavirus en una planta argentina, ésta frenaría sus embarques y solicitaría ser suspendida por Pekín de la lista de empresas autorizadas para exportar a China hasta que el ente sanitario local y luego el país asiático autoricen su reincorporación. Ningún frigorífico tiene detenida su producción por coronavirus entre sus empleados. El mes pasado siete plantas suspendieron sus exportaciones debido a casos de contagio entre trabajadores. Un mes después están exportando todas de vuelta.  
- A.V.: ¿Y lo de Pesce con AEA cómo estuvo? picante supongo... 
- I: No la verdad que no. Las ventajas del Zoom, que descomprime todo. Es difícil el enojo por internet, las pantallas dulcifican las broncas. Igual, Pesce es un hombre curtido en explicar lo que hace el BCRA y  habló más de una hora con Luis Pagani (Arcor), Paolo Rocca (Techint), Sebastián Bagó (Laboratorios Bagó), Cristiano Rattazzi (Fiat), Eduardo Elsztain (IRSA), Marcos Galperín (Mercado Libre) y Martín Migoya (Globant) y 30 empresarios importantes. Los temas fueron varios, pero todos de agenda: desmintió que el BCRA se esté quedando sin Reservas Netas en un mes, volvió a tratar de tranquilizar a los empresarios con los efectos inmediatos que iba a tener el recorte de la brecha entre dólar MEP, CCL y Blue, y al final les dijo que las medidas que más les preocupa a los empresarios -la obligación a para las compañías de renegociar el 40% obligaciones negociables por los próximos seis meses- se termina en poco tiempo, son transitorias. Aunque no lo dijo, entre los empresarios creen que se acaba en enero, cuando termine de ingresar los dólares de la soja y la carne que el gobierno acaba de flexibilizar. 
-A.V:¿Y es cierto que el FMI nos puede prestar de nuevo?  
- I: La semana que viene llega una nueva misión del FMI, y aunque en el gobierno todos dicen que al FMI solo se va a pedir plata para pagarles deuda, en los hechos la Argentina tiene habilitada una línea con el Fondo Monetario Internacional de financiación con Derechos Especiales de Giro (DEG) para ser usada en catástrofes naturales o emergencias sanitarias. Son entre 3.000 y 3.500 millones de dólares. Y aunque nadie lo diga en público, el coronavirus podría ser una buena excusa para obtener dólares frescos. Esto no es un favor a la Argentina: la disponibilidad de los fondos del DEG (Special Drawing Rights, en inglés) le fue adelantada personalmente a Martín Guzmán por la directora gerente del organismo financiero, Kristalina Georgieva. Fue el secretario de Política Económica del Fondo, Haroldo Montagu, quien se lo recordó al ministro de Economía. Pero espere un poco: A partir del 6 de octubre los tiene en Buenos Aires a Julie Kozack, directora adjunta del departamento del hemisferio occidental del FMI, al venezolano Luis Cubeddu, jefe de misión para Argentina, al cual se le unirá el jamaiquino Trevor Alleyne, representante residente del FMI en Argentina. Entre los tres develaran la duda: si el FMI nos da un préstamo de 3500 millones por el coronavirus. O si será otro el salvador de las reservas.