Fue mediante el decreto 332/2022, publicado en un suplemento extraordinario del Boletín Oficial. Tal como se había estipulado meses atrás, la segmentación reconoce tres niveles de usuarios, de los que solamente el 10% de mayor capacidad económica pagará la tarifa plena sin subsidios.
Esa decisión implica una serie de incrementos de los valores vigentes que, según explicó Cerruti, se prorratearán de manera bimestral en la segunda mitad de 2022. Son los usuarios que tendrán a su cargo el costo pleno del componente energía de cada servicio.
Esa franja está comprendida por aquellos que reúnan al menos uno de los siguientes requisitos:
- Ingresos mensuales netos superiores a un valor equivalente a 3,5 Canastas Básicas Totales (CBT)
- Ser titulares de tres o más automóviles con antigüedad menor a cinco años
- Tres o más inmuebles
- Una o más aeronaves o embarcaciones de lujo y/o de activos societarios que exterioricen capacidad económica plena.
El segundo nivel está integrado por los beneficiarios de la tarifa social y programas sociales nacionales (AUH, AUE, AUD, Progresar, Potenciar Trabajo, entre otros). Podrán ser incluidos en el padrón de beneficiarios sobre la base de la información con la que cuenta el Estado en sus registros.
En tanto, el tercero es un nivel intermedio entre los dos anteriores: son propietarios de dos o más inmuebles o de un vehículo de hasta tres años de antigüedad, excepto los hogares donde exista al menos un o una conviviente con Certificado Único de Discapacidad (CUD).
Tanto el nivel 2 como el 3 ya tuvieron los ajustes tarifarios correspondientes, equivalentes respectivamente al 40% y al 80% de la variación salarial del año pasado, y no volverán a tener incrementos en 2022.|