A causa de las limitaciones para transportar gas natural desde Neuquén o Bolivia, el Gobierno busca abastecer las reservas de las centrales eléctricas para garantizar el funcionamiento de las industrias. Con esto se evitarían medidas más perjudiciales, como lo fueron los cortes programados realizados en 2013 y 2015.

Debido al rol fundamental que juega el combustible líquido en esta situación, se ejecutó la compra en el marco de una licitación pública llevada a cabo por la Compañía Administradora del Mercado Eléctrico Mayorista (Cammesa) a través del sitio especializado EconoJournal.

La fecha estimada es del 18 de enero, y las compañías que están habilitadas son tres: Trafigura, Vitol y Glencore. Las mismas disponen del almacenamiento necesario, dentro del país, y realizan el transporte de derivados de combustibles en Paraguay y Bolivia.

Esta clase de operación "relámpago" es atípica en un contexto donde las licitaciones tienen plazos de entre 45 y 60 días, según especialistas, y permite suponer que los precios por lo tanto, serían más elevados.

Cammesa ya había estimado en septiembre de 2021 que el consumo anual de las centrales eléctricas alcanzaría la cifra de 600.000 metros cúbicos.

No obstante, la sequía de la cuenta del Paraná- Paraguay, la faltante de reservas hídricas en la región patagónica y la dificultad de importar gas desde Bolivia, podrían provocar un aumento sensible de los valores previstos.|