Durante la 4ta edición de la EFI Week, un evento online donde especialistas analizan el contexto local e internacional, el sistema financiero, el mercado de capitales, la coyuntura macroeconómica y las perspectivas de la economía del país, el sector productivo de la pequeña y la mediana empresa fue protagonista.
En el cierre, con la moderación de Claudio Destefano, y con el objetivo de compartir el proceso de reconversión empresarial vivido durante la pandemia, el panel de PyMES reunió al presidente de Confecciones Seman, Alejandro Pernas; al gerente de Segmentos Empresas del Banco Supervielle, Carlos Campos; al director de Marketing de juguetes Rasti, Daniel Dimare, y a Cristian Panizzi, socio de la empresa Trufas del Nuevo Mundo.
En el caso de una industria muy particular como es el caso de la sastrería de alta costura de Confecciones Seman, su presidente, Pernas, explicó que, debido a la pandemia de coronavirus, se vieron obligados a dar “un volantazo de timón” teniendo que “bajar la producción de sastrería, porque no se vendía, y pusimos en marcha una línea de fabricación de camisería, que antes no lo veníamos haciendo”. Otra acción motivada por la pandemia fue “la creación de la tienda online, que venía siendo un proyecto que nunca terminábamos de cristalizarlo”, agregó.
En cuanto a la industria de juguetes, el director de Marketing de Rasti, Daniel Dimare, aseguró que “los primeros meses fueron difíciles porque el juguetero no estaba preparado a vender por e-commerce”. Con la voluntad puesta en reinventarse, lo primero que hicieron desde Rasti fue “generar cursos con Mercado Libre y con Tienda Nube para que les enseñen a los jugueteros a salir a vender por internet y nosotros inmediatamente creamos una tienda online, cosa que habíamos rechazado durante 50 años por respeto al juguetero, pero tuvimos que hacerlo para que nuestros productos se vendieran y que la fábrica vuelva a tener ingresos”, señaló.
Para Cristian Panizzi, de Trufas del Nuevo Mundo, la pandemia los incentivó a “empezar a implementar la venta online” y además los “obligó a acelerar el proceso de exportación”. Como el encierro los encontró justo en plena cosecha con el cierre de los restaurants, que son sus principales compradores, y sumado a que la trufa es un producto que se vende mejor fresco que congelado, tomaron la decisión de empezar a exportar a España y Francia, en 2020, y este año ya abrieron el mercado de Estados Unidos.
En cuanto al trabajo de entidades financieras, el gerente de Segmentos Empresas del Banco Supervielle, aseguró que tuvieron “dos grandes desafíos”. Por un lado, un proceso de “adaptación muy grande”, que consistió en digitalizar el acceso a operaciones que, pre pandemia, se realizaban de manera presencial: “desde ir a retirar una chequera hasta hacer una operación de crédito”, explico Campos. Y por el otro lado, cómo profundizar su filosofía de “human banking” para poner “un toque humano a lo que es el desarrollo tecnológico”, añadió.
El lado evolutivo de la pandemia
Más allá de las malas noticias que dejó a pandemia, el singular y sorpresivo escenario trajo también diferentes oportunidades de innovación en diversos sectores empresariales. “Veíamos que los clientes tenían una necesidad de tener toda la disponibilidad de la tecnología al servicio de su empresa, pero que además querían, cuando tenían un problema en particular, levantar un teléfono y que haya una persona del otro lado. A partir de eso, y de estos meses, lo que tuvimos que hacer fue empezar a salir del protocolo habitual de pedir el último balance, las últimas ventas, calificar a un cliente, y cómo segmentar a una empresa, que por ahí por números pasa a ser chica, pero en realidad viene siendo chica porque estuvo el 70% cerrada. En ese sentido, lo que estamos tratando de hacer hoy es no apalancarnos las líneas en números de balance, sino en el comportamiento y en cómo es el circuito de negocio, tratando de ser lo más predictivo posible y salir del análisis de mirar números porque hoy el balance 2020 no te dice mucho de una empresa”, describió Campos al comentar las modificaciones que acompañan la nueva normalidad.
Para Dimare, en Rasti, el trabajo “evolucionó” producto de la necesidad de reinventarse dentro del contexto del home-office que “llegó para quedarse”, según describió. Si bien apuntó que el consumo de juguetes y el “target etario” bajaron mucho, dijo que “subió mucho la cantidad de padres que querían estimular a sus hijos y sacarlos de las pantallas”. Además, en su camino por “abrazar a la tecnología”, Dimare explicó que ya sumaron lo que ellos llaman “diversión aumentada”, que consta en agregar “realidad aumentada a los juguetes con una Tablet, por ejemplo, después de construir un castillo, le apuntás con un smartphone y te aparece un dragón que puede interactuar con la construcción”, explicó.
Al hablar de nuevas experiencias surgidas gracias al contexto de pandemia, Alejandro Pernas, de Confecciones Seman, comentó la oportunidad de posicionarse como marca en distintos shoppings donde no tenían presencia y “en plena pandemia firmamos con Unicenter y Patio Bullrich”, contó y asumió que esta alianza sirvió tanto para posicionarse como para contar con puntos de facturación.
En cuanto al seguimiento financiero, Campos, expresó que “si uno no tiene el primer empujón para hacer una inversión es muy difícil emprender”. Por eso, destacó que actualmente, la entidad bancaria está analizando cómo acompañar a los emprendedores y pymes chicas que “no surgen de la nada, sino que normalmente son personas que vienen de otra actividad, y que nosotros veíamos que el sector financiero no te acompaña”.
“En esa necesidad”, continuó Campos, “empezamos a salir con una línea especial que tenemos que se llama línea express, que, en función de los antecedentes del socio de la empresa, le damos una línea hasta 1 millón de pesos. Es decir, vos constituís una SRL, pasaste todas las trabas que podés tener para abrirlas y, si llegaste a ese punto con un buen negocio, el banco no te pide una historia de esa empresa, sino que te pide la historia personal que todos tenemos”, concluyó el gerente de Segmentos Empresas del Banco Supervielle.
En líneas generales, los empresarios pyme celebraron su participación en Expo EFI Week, donde pudieron compartir sus experiencias durante los duros tiempos de la propagación del Covid - 19, y al mismo tiempo acercarle al público aquellas herramientas que les permitieron surfear con menores inconvenientes la ola de los contagios en la Argentina.
El evento virtual se llevó a cabo junto con el Congreso Económico Argentino, donde consultores, analistas y profesionales destacados de la Argentina y el mundo, dieron a conocer su visión del contexto actual y sus pronósticos acerca del futuro mediato.|