Pese a la inflación la industria creció un 6% en abril respecto a 2020 – Negocios & Política
 

Por consumo de energía |Pese a la inflación la industria creció un 6% en abril respecto a 2020

La actividad productiva, medida según el consumo de energía, creció un 6% en relación al mismo mes de 2019 pero, como consecuencia del impacto de la segunda ola de Covid-19, bajó en comparación con marzo de 2021.
Ana Belén Ehuletche
Economía
Ana Belén Ehuletche
Economía

El último informe de Panorama Productivo elaborado por el Centro de Estudios para la Producción (CEP XXI) indica que en abril el índice adelantado de actividad industrial (que toma como insumo el consumo de energía de CAMMESA) se contrajo 2,9% mensual desestacionalizado respecto a marzo.  

En la comparación de los últimos 12 meses, el consumo de energía se ubicó 6% por encima de abril de 2019, y 58,6% por encima de abril de 2020, que coincidió con el peor momento económico de los meses de pandemia. 

“Más allá de la baja mensual de abril, 11 de 16 sectores industriales consumieron más energía que en el promedio de 2019 (en la medición desestacionalizada)”, analiza el informe y señala que “las caídas mensuales contra marzo reportadas por 13 de 16 sectores fueron relativamente moderadas dada la magnitud del rebrote de coronavirus (-3,1% en promedio en esos 13 sectores), con la más profunda en el sector automotriz (-9,3%)”. 

Aunque la industria no tuvo restricciones para operar, las bajas reportadas se deben principalmente a la mayor cantidad de contagios entre el personal, lo que obligó a suspender turnos en ramas como la siderurgia y la automotriz, y la falta de insumos como oxígeno, un material importante en ramas como la siderurgia. 

A esto se le sumaron factores no directamente vinculados con la pandemia, como conflictos en el sector portuario, que provocaron falta de insumos en diversas fábricas, y paradas técnicas por mantenimiento en algunas fábricas del sector automotriz y la siderurgia. 

En cuanto a los datos de empleo, el documento del CEP XXI refleja que la segunda ola llegó en un momento en el cual, producto de la reactivación económica, el empleo —tanto formal como informal— estaba en vías de recuperación.  

De acuerdo a datos del Ministerio de Trabajo de la Nación, el empleo asalariado formal privado, que había tocado un piso en agosto pasado, con una contracción neta de 176,1 mil trabajadores respecto a la prepandemia, viene recuperándose desde el año pasado. 

En ese sentido, el estudio indica que “la importante recuperación del empleo en la construcción, la industria y los servicios profesionales y empresariales (que, juntas, crearon 55 mil empleos desde agosto pasado) se vio limitada por la persistente baja del empleo en ramas como hoteles, restaurantes, transporte y servicios culturales y personales (que, en conjunto, experimentaron una baja de 33,8 mil empleos desde agosto, y de 98,1 mil desde la prepandemia)”. 

Aún al interior de la industria, que en febrero de 2021 tuvo 19,8 mil puestos de trabajo más que en la prepandemia, se encuentran heterogeneidades: 18 de 24 industrias, como caucho y plástico, alimentos, químicos y aparatos de uso doméstico han creado empleo. 

La contracara de esta situación se observa en los sectores de indumentaria, calzado y cuero, ramas que ya venían registrando caía de actividad antes de la crisis sanitaria y se vieron perjudicadas por cambios de hábitos de consumo, destacan desde el CEP XXI. 

En clave territorial, dentro de los distintos departamentos o partidos también se refleja diversidad en el desempeño. Los que mostraron mejores resultados son los que forman parte del núcleo agroindustrial del país, como el este de Córdoba, el oeste de Santa Fe y parte de la provincia de Buenos Aires.  

También se destacan provincias como Tierra del Fuego y San Luis, que poseen una elevada especialización industrial como consecuencia de políticas de promoción regional.   

Con el repunte de la demanda de electrónica, principalmente celulares y TVs, la producción fueguina creció en la segunda mitad de 2020 y principios de 2021, y generó más empleo formal, particularmente en Río Grande. A su vez, el informe económico apunta que gran parte de la provincia de San Luis y, en particular, Villa Mercedes, el principal polo industrial de esa provincia, también exhibió un alza del empleo asalariado privado formal. 

Otro indicador que sugiere que el impacto de la segunda ola en materia económica está siendo “relativamente acotado” es el de la movilidad de las personas. Desde el CEP XXI explican que “en abril y en lo que va de mayo se observa un aumento de la movilidad en zonas residenciales en todas las provincias, pero en ningún caso —salvo Formosa, que tuvo pocos contagios en 2020 y una fuerte suba en las últimas semanas— se retornó a los niveles del segundo trimestre del año pasado”. 

En ese sentido, en el promedio del país, la movilidad en zonas residenciales se ubicó en valores similares a los de noviembre-diciembre.|

    Vínculo copiado al portapapeles.

    3/9

    Lorem ipsum dolor sit amet, consectetur adipisicing elit.

    Ant Sig