En una investigación que comenzó en marzo, la Dirección General de Aduanas, detectó que 19 frigoríficos declararon mercadería en forma incorrecta con el objetivo de reducir la carga tributaria y subfacturar el precio de los productos que venden en el exterior.
A partir de la evidencia encontrada, el organismo que conduce Silvia Traverso presentó una denuncia “por maniobras de evasión tributaria y por menor ingreso de divisas al mercado cambiario”.
Las irregularidades de los exportadores de carne bovina se enmarcan en lo que se conoce como “declaración inexacta” en el comercio exterior. “Los frigoríficos denunciados declararon exportaciones de hueso y carne no apta para consumo humano, mercadería que paga un 5% de Derechos de Exportación”, señalaron desde Aduana y explicaron que la fiscalización realizada encontró que se trataba de alimento apto para consumo humano, productos que tienen una alícuota del 9%.
En síntesis, los 19 frigoríficos denunciados declararon mercadería en forma incorrecta con el objetivo de reducir la carga tributaria y subfacturar ventas:
- Declararon exportaciones de hueso y carne no apta para consumo humano, mercadería que paga un 5% de Derechos de Exportación
- La fiscalización realizada por la DGA detectó que se trataba de alimento apto para consumo humano, productos que tienen una alícuota del 9%
- La maniobra implica: perjuicio fiscal para el Estado y un menor ingreso de divisas
Las multas acumuladas por las maniobras de evasión y subfacturación de las exportaciones denunciadas, alcanzan los USD 5,8 millones.
Aunque no se difundieron los nombres de los frigoríficos porque existe un “secreto fiscal” en torno a la investigación, se informó que se envió mercadería bajo estas operaciones a más de 10 países diferentes, pero los embarques se despacharon fundamentalmente hacia China y Hong Kong.
Valores de referencia
En vías de “ordenar” el mercado, en lo que va del año, la DGA ya actualizó 3 veces los valores referenciales de exportación de carne bovina para identificar operaciones de subfacturación, prácticas abusivas que afectan el ingreso de divisas al mercado cambiario y evitar la competencia desleal.
“La decisión coordinada junto con el Ministerio de Desarrollo Productivo y el Ministerio de Agricultura establece nuevos precios de referencia para distintos cortes en el marco del diálogo permanente con distintas cámaras representativas del sector privado”, indicaron desde el organismo.
La última actualización, bajo la Resolución General 4985, definió un incremento en los valores referenciales que habían sido definidos a fines de enero para la carne bovina. Los destinos de las exportaciones para los que rige la normativa son China, Japón, Hong Kong, Tailandia, Corea del Sur, Filipinas y Taiwán.
La normativa indica que los valores de referencia ofrecen “un primer control de las declaraciones en resguardo del interés fiscal” y que con eso se busca “detectar desvíos respecto de los valores usuales para mercaderías idénticas o similares”.
El instrumento había sido desarticulado durante el gobierno anterior y la gestión de Silvia Traverso en la DGA definió restablecerlo como parte de su estrategia de fiscalización y control del comercio exterior.
En diciembre de 2015 había más de 1.100 productos específicos con valores referenciales, lo que abarcaba casi 900 posiciones arancelarias. El gobierno anterior llevó adelante una paulatina desarticulación de la herramienta hasta que, en noviembre de 2017, derogó la normativa que permitía establecer valores referenciales.
A partir del análisis de distintos complejos productivos e industrias, la Aduana comenzó el año pasado a establecer valores de referencia que, hasta ahora se aplican a las exportaciones de peras, manzanas, ajo, carne de cerdo, tomate perita, mosto concentrado, arándanos, leche en polvo, cebolla, papa, pasas de uva y corvina.|