Guillermo Michel, titular de Aduana, Flavia Royón, secretaria de Minería y Energía, y el subsecretario de Comercio Exterior, Germán Cervantes se comprometieron con Rucci y Pereyra a convocar a las empresas que manifestaron tener problemas con la importación de insumos y equipamiento.
La falta de insumos críticos para Vaca Muerta generó un cimbronazo en la industria hidrocarburífera. Alertaron sobre la necesidad de que se flexibilice la autorización de importaciones en virtud que había insumos para un mes de producción, o mes y medio a lo sumo, y luego podría haber paralizaciones.
En busca de la solución
El secretario sindical, Marcelo Rucci expresó: "Queremos encontrar soluciones a este problema que nos afecta directamente, ya que pone a los trabajadores en riesgo de despidos o los deja con menor carga horaria, algo que no podemos permitir", y, al finalizar la reunión añadió: "Las obras de infraestructura que se están construyendo o ya están en funcionamiento, como el Gasoducto Néstor Kirchner o el Oleoducto a Chile, requieren un aumento significativo en la cantidad de equipos, y esto no está sucediendo".
"Si realmente existieran todas las complicaciones que dicen que hay de importaciones de industria y para Vaca Muerta tendríamos a todos los canales de televisión transmitiendo en vivo las fábricas cerradas", dijo Michel en contraposición en una entrevista para el programa Desiguales, en la Televisión Pública horas después de recibirlos.
Y reforzó su apreciación: "Yo no conozco una sola fábrica que haya cerrado por falta de insumos o un solo pozo en Vaca Muerta que haya finalizado la operatoria por esto". Sugestivamente mientras ocurría la reunión, la Aduana daba a conocer que la firma DLS ARGENTINA LIMITED apeló a maniobras irregulares para concretar la importación de insumos industriales a ser usados en Vaca Muerta y le reclamó el pago de $1.160 millones en concepto de aranceles y multas
Faltantes de insumos y amenaza de paro del sindicato
Desde la Cámara de Servicios Petroleros, reconocieron que hay faltantes de trépanos de perforación, repuestos para herramientas de perforación direccional, repuestos para compresión, válvulas, cabezales, tuberías, rodamientos, insumos químicos y módulos electrónicos, entre otras piezas específicas.
Además distintos actores reconocen que se están desarmando equipos para sacar repuestos y colocárselos a otros para hacerlos funcionar, lo que atenta también contra la seguridad de los trabajadores.
La situación tomó temperatura y el Sindicato de Petróleo y Gas sacó una solicitada alertando que La Aduana (el propio Gobierno) estaba frenando el desarrollo de Vaca Muerta y que si no se regularizaron las importaciones, y se suspendían empleados iban a parar la actividad de manera total.
En el documento se advertía que "en las últimas tres semanas se había liberado sólo el 7% de las SIRAS, que había empresas que estaban desarmando equipos para usarlos como repuesto de otros y hay operadoras que solo tienen herramientas para funcionar un mes".
A su vez alertaban del problema de que las empresas empiecen a suspender empleados o bajarlos a la base, con la consecuente baja en la producción y merma en los sueldos de los empleados e ingresos del país. Por cada mes que se frena la actividad, se dejan de producir hasta un millón de barriles, equivalente a 80 millones de dólares, detallaba la solicitada.