El pasado jueves y viernes fueron días movidos para la economía argentina. Tal es así, que el dólar blue cerró la semana ofrecido a $195 para la venta, con un incremento de cinco pesos en el mercado marginal y registrando un muevo máximo. 

Desde el 15 de septiembre hasta la fecha, momento en el que se aplicó el impuesto de 35% a cuenta de Ganancias para la venta de divisas para atesoramiento, el paralelo creció $64 (48,5%). Y en lo que va del año, más de 10 meses, trepó un 159%.

Como se sabe, la escalada del paralelo trae sus “consecuencias”, ya que la suba termina impactando en la tecnología, los insumos, la logística, los servicios y la materia prima. Por decantación, el producto final se termina encareciendo aún más. Y como de costumbre, siempre están los que sacan “provecho” de la situación.

Y en ese sentido, quien alzó la voz fue la Unión Argentina UAS, entidad que nuclea a clínicas, sanatorios, hospitales, centros de diagnóstico, obras sociales, financiadores, servicios de urgencia, que atiende al 70% de la población; advirtiéndole al Ministerio de Salud que en los últimos meses se produjeron ajustes en los medicamentos destinados a pacientes con Coronavirus, que alcanzan el 503%.

Lo hizo a través de un comunicado, donde señalaron que “desde marzo a la fecha, algunos laboratorios y droguerías actualizaron los valores de los medicamentos en porcentajes que exceden de manera descomunal inclusive los deslizamientos cambiarios de los últimos meses, en un contexto en el que todos los ingresos del sector se encuentran congelados desde diciembre de 2019”.

Las cifras que dio la UAS son impactantes: describieron que se han encontrado con “aumentos de hasta el 1.100% en medicamentos que deben administrárseles especialmente a los pacientes con Covid-19", sobre todo a aquellos con “síntomas más graves, que requieren una combinación de drogas para su tratamiento”. 

Por ejemplo, una persona con respirador necesita un miorrelajante, una droga contra el dolor y un sedante potente. “Todos estos precios se dispararon sin control alguno y muy por encima de cualquier parámetro razonable”, aseguran. 

La entidad puntualizó que “el promedio de aumento es del 503%, pero existen otros que incrementaron sus costos todavía por encima del mismo”, y remarcó que “se ajustaron los precios sobre muchos medicamentos que son imprescindibles para el tratamiento de pacientes graves”.

La UAS relevó que el sector está “en un momento en el que las instituciones están priorizando la vida de las personas, pero, al mismo tiempo, el financiamiento del sector”, y afirmó que “aún con los ATP otorgados por el Gobierno se encuentra en una crisis terminal”.

“Necesitamos con urgencia que el Gobierno actúe sobre quienes, en estos momentos de gravedad e incertidumbre para todos los ciudadanos, se aprovechan de la situación para obtener recursos excesivos cuando advierten que aquellos insumos son indispensables para salvar la vida de los pacientes”, concluyó la entidad.